Darvin Ham en la cuerda floja: la dirigencia de los Lakers se cuestiona la continuidad del entrenador por los malos resultados

Darvin Ham, entrenador en jefe de Los Angeles Lakers. (Foto: Reuters)

El creciente descontento de LeBron James y el resto del vestuario con el funcionamiento del equipo y las decisiones del adiestrador tensionan a la franquicia angelina.



Los Angeles Lakers viven horas y días difíciles en la NBA. La franquicia más ganadora con 17 títulos -junto a los Boston Celtics- se enfrenta a diversos problemas y desacuerdos entre las principales figuras del plantel y su entrenador jefe, Darvin Ham.

El estratega arribó a la banca de Los Lakers en 2022, temporada en la cual llegó hasta la final de la Conferencia Oeste, en la que cayó por 4-0 ante los Denver Nuggets, equipo que terminó coronándose con el anillo. A pesar de acceder hasta esa instancia, la relación de los jugadores con Ham esta campaña no ha sido buena del todo. Según asegura Shams Charania, uno de los principales insiders de la NBA, la química del plantel con el DT está rota producto de diferencias en la táctica. Frente a este quiebre, la dirigencia angelina se debate entre si estos serán los últimos días a cargo del equipo o si se le ratifica en la institución.

La ruptura del camarín

El vínculo con Ham viene arrastrando complejas situaciones desde la campaña pasada. Bajo su dirección en la etapa 22/23, los Lakers quedaron en la séptima posición con un récord de 43 victorias y 39 derrotas, superando apenas la barrera del 50% de rendimiento. Tras superar a los Minnesota Timberwolves en el partido de play in, Los Angeles hizo lo mismo al eliminar a los Memphis Grizzlies y a los Golden State Warriors en las rondas posteriores. Sin embargo, uno de los momentos que dieron cuenta de la tensa relación de LeBron James y su entrenador fue cuando, en medio de un tiempo muerto de uno de los partidos contra los Dallas Mavericks, el basquetbolista intervino airadamente para que le dieran la pizarra que tenía el estratrega para diseñar él mismo la jugada.

A todo esto, se suma la posterior barrida que les propinó Nikola Jokic y sus Denver Nuggets en la final de conferencia, instancia en la que los laguneros no tuvieron respuesta táctica a los embates del equipo del estado de Colorado.

Para la presente temporada, los Lakers han vuelto a tener un inicio de temporada turbulento. Un escueto registro de 17-18 los tiene en el décimo lugar del Oeste, a punto de quedarse afuera de la postemporada. Si bien los angelinos solo han jugado 35 partidos de los 82 posibles, las sensaciones no son buenas. En el encuentro del 30 de diciembre de 2023 ante los Timberwolves, LeBron James manifestó su frustración con su entrenador en jefe a raíz del esquema que planteó para la jugada final: con 1,4 segundos restantes en el reloj, el coach preparó una maniobra que terminó en un tiro poco elaborado y con la marca rival encima.

James, que consignó 26 puntos y 6 asistencias aquella noche, no quedó satisfecho con la forma en la que el equipo terminó ese partido. “El año pasado tuvimos 5 o 6 juegos que se decidieron así en el final. No podemos actuar de forma tan estúpida cuando llega el anuncio de que faltan dos minutos para que termine el partido”, comentó LeBron cuando se le preguntó en rueda de prensa sobre la falta de estrategia y jerarquía para cerrar juegos apretados.

Problemas en el funcionamiento

Con 9 caídas en los últimos 12 enfrentamientos, los cuestionamientos al interior de la organización son cada vez mayores. La desconexión entre Ham y sus dirigidos han puesto en alerta a la dirigencia comandada por Jeanie Buss, acrecentando la duda en torno a un posible despido del otrora jugador de la NBA.

Según explica Charania, las razones del quiebre actual están estrictamente relacionadas al funcionamiento que ha implementado el adiestrador durante estos meses. La extrema rotación de jugadores y los múltiples ajustes en la alineación titular no han sido del gusto de LeBron James, Anthony Davis y compañía. En la derrota de este miércoles ante Miami Heat, el DT utilizó la décima formación distinta en lo que va de temporada. Además, la decisión de mandar al banquillo a D’angelo Russell en el partido del 23 de diciembre contra Oklahoma City Thunder significó un golpe duro al interior del camarín, puesto que Los Lakers salieron a la cancha sin un distribuidor de balón puro que acompañara a King James.

Ante los continuos cambios del quinteto titular, Ham atribuye la crisis a las lesiones de integrantes claves de la plantilla. “Cuando tienes a tus jugadores de rol lesionados y se pierden tres o cuatros partidos, uno tras otro, eso lo hace todo más difícil. Estamos aquí para explorar todo lo que podamos para enderezar el barco”, concluyó el entrenador en conversación con los medios estadounidenses.

Las próximas horas serán claves para definir el futuro del entrenador en jefe de Los Angeles Lakers. Sin el respaldo de los referentes del plantel y con la afición cuestionándolo por el mal desempeño, Darvin Ham depende del veredicto de la dirigencia para saber si continúa en la franquicia o debe abandonar la ciudad de las estrellas.

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