No más sueños húmedos: consejos y productos para dormir bien cuando hace calor

Foto: Liudmila Cherneska.

Si sientes que te derrites en tu cama (o donde sea que duermas) y el insomnio veraniego pone en riesgo tu ánimo y energía, recopilamos distintas maneras y estrategias para mantener más fresca tu habitación durante las noches.




No es una exageración, es una realidad: el calor se ha sentido más fuerte que otros años y las cifras lo avalan. Entre San Felipe y Puerto Williams, Chile ha registrado 51 olas de calor durante los últimos 90 días, lo que significa que la zona central del país ha enfrentado más temperaturas máximas que el año anterior.

El balance de la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), correspondiente al año 2022, evidencia lo que ha sucedido estas últimas semanas. En noviembre, Curicó anotó 36,6°C, el cuarto día más caluroso durante este mes desde 1926. Por su lado, Concepción alcanzó los 31.3°C y San Felipe, uno de los lugares más icónicos de las altas temperaturas, registró 38.3 °C, la más alta que ha atravesado la ciudad en su historia en noviembre. Los termómetros en Santiago, por su lado, alcanzaron un peak de 36.7 °C, la tercera temperatura más alta desde 1911.

Ya sabemos que el calor extremo puede causar consecuencias en la salud de las personas: insolación, desmayos, deshidratación o desmayos, son algunas de las reacciones que pueden ocurrir en caso de que no se proteja lo suficiente, sobre todo en niños y adultos mayores. A su vez, con las olas de calor, aumentan los niveles de ozono y de otros contaminantes del aire, mientras que alergenos como el polen también se acrecientan, por lo que aparecen condiciones propicias para que se desencadenan descompensaciones respiratorias.

En verano, es mejor dormir con ropa de algodón y sábanas ídem.

“Es importante, si usted puede, mantenerse en un lugar fresco, ojalá ventilado”, dice Macarena Zegers, enfermera del Servicio de Emergencia Help. Entre las recomendaciones para regular la sensación térmica están:

  • Tomar abundante líquido;
  • Usar protector solar;
  • Vestir sombrero, para disminuir la radiación que llega a nuestra cabeza”.

Para saber si el calor está teniendo impacto en nuestro organismo, hay varios síntomas que son inequívocos. Los principales, dice Zegers, son:

  • piel muy roja y seca, signo de que me estoy insolando y deshidratando, y por ende debo ingerir líquidos y permanecer a la sombra;
  • respiración y frecuencia cardiaca elevada. Si el acto de respirar es muy acelerado, significa que el cuerpo está tratando de eliminar el calor interno. La frecuencia de los latidos se vincula con esto, y puede causar graves problemas en hipertensos o cardiópatas.
  • dolor de cabeza palpitante.

¿Qué hacer en caso de una emergencia? En primer lugar, se debe abandonar el ambiente de calor y ojalá ir a un ambiente fresco, cerrado, con aire acondicionado o a la sombra. Se debe retirar el exceso de ropa, “ya que hace que nuestra piel no pueda eliminar el calor; y también hay que tomar mucha agua”, añade Zegers.

Otra alternativa útil es colocar toallas mojadas con agua tibia en zonas de pulso, como en los codos, en las zonas de inflexión, ingle, cuello y tórax. ¿Y por qué no agua helada? “Porque nuestro cuerpo intentará retener este calor y se va a contraer, entonces en vez de eliminar el calor, voy a guardarlo”. Al usar líquidos tibios, “voy a poder liberar calor de manera lenta sin tener un desajuste en mi cuerpo”.


Dormir en el infierno

Cuando llega la noche no siempre aparece el alivio. El calor baja pero muchas viviendas lo retienen entre sus materiales, por lo que conciliar el sueño a una hora decente se vuelve una tarea desesperante. Acostarse destapado no es suficiente, tampoco hacerlo sin pijama: dormir con estas temperaturas requiere de absoluta quietud y concentración, una tarea casi mística, encomendada más a un faquir o un monje tibetano que a una persona cansada que ve cómo el reloj avanza pero no así el frescor.

Pero no hay que rendirse. Dormir bien, y las horas suficientes, es fundamental para sentirse con buen ánimo, energía y concentración al día siguiente. Y aunque el calor lo ponga difícil, hay maneras y productos para combatirlo y tener el sueño fresco y cómodo que merecemos.

Para nuestra cama

Hemos atravesado varias olas de calor este año y no sabemos si podrían venir más en camino, por lo que hay que asegurarse. Si tienes el presupuesto, hay ciertos implementos que pueden ayudar a sobrellevar esa hostigosa sensación de calor.

Para la cama, puedes seleccionar ciertas fibras y materiales que sean adecuadas para capear la sensación de sofoco o pegajosidad que conlleva el calor. Desde Rosen, empresa chilena especializada en productos para dormir, señalan que la fibra más apropiada es el algodón, conocido por ser fresco y traspirable.

“El algodón peinado, el algodón egipcio y nuestro algodón suvin cumplen a cabalidad ambos atributos, lo que ayuda a dormir más frescos durante la noche”, comenta Fabiola Carvajal, product manager de textiles. Otra opción natural es el bambú, fibra cuya estructura está “llena de microporos, por lo que tiene una gran capacidad de absorción de la humedad”, explica. Si se comparan ambas fibras, esta última al tacto es un poco más liviana.

Sábana lisa de bambú Rosen 400 hilos (dos plazas)


Otro artículo que puede hacer más cómoda tu experiencia en las noches de calor son las almohadas de gel, cuya tecnología y materialidad están diseñadas para mantenerte fresco. “Su material denso no encapsula la temperatura y la lámina de gel cuenta con canales de ventilación que disipan la humedad”, explica Carvajal.

La mayoría de la gente tiene almohadas de pluma, fibra o microfibra, materiales que no son tan convenientes para atravesar las noches de calor. “Por su conformación, guardan aire entre su tejido, lo que mantiene el calor en tu cabeza sin posibilidad de disiparlo. Eso hace que queramos voltear a cada rato la almohada para mantenernos frescos”.

Almohada de gel Rosen Coolmax (69x45cm)


Las almohadas con látex son otra alternativa compatible para las noches de calor. “Su material denso consigue mantener la temperatura hasta 2 grados más baja que la del exterior, mientras que su relleno está cubierto con una funda de algodón egipcio, lo que potencia su frescura”, agrega Carvajal. Esta es una buena opción para quienes se mueven mucho al dormir dada la alta resiliencia del material.

Aire acondicionado

Adquirir un aire acondicionado es una gran inversión pero cada vez se vuelve más tentadora y necesaria. Los de tipo split —que se llaman así por estar divididos en una parte dentro de la habitación y otra afuera— funcionan extrayendo el calor de la habitación, expulsándolo hacia afuera, mientras por el otro lado lo devuelven más frío, luego de un intercambio de energía provocado por un líquido refrigerante y un complejo sistema de termodinámica.

En un artículo pasado, mencionamos que los del tipo split inverter son los más eficientes. “Funcionan con menos energía, por lo que a la larga tendrías más horas de refrigeración por el mismo consumo de electricidad”, nos decía María Luisa del Campo, académica y directora del centro tecnológico Kipus, de la Universidad de Talca. Este aparato es capaz de reducir la temperatura de un lugar son también capaces de aumentarla cuando haga frío, por lo que además son útiles tanto para verano como para invierno.

Aire acondicionado Splendid split inverter SAC-09K-O 9000 BTU

Respecto a los aires acondicionados portátiles, Ricardo Hermosilla, docente de la escuela de Mecánica de la Universidad Tecnológica Metropolitana, explicaba en ese mismo artículo que “tienen el mismo funcionamiento que los split, pero su punto débil es el rechazo del calor. Al no tener dividido el sistema, en la parte trasera del equipo queda el condensador, que debe permanecer caliente y por lo tanto será una fuente de calor constante. Ahí se pisa la cola”.

Lo recomendable no es dormir con el aire acondicionado encendido toda la noche. No solo por el gasto energético que produce o el ruido constante que provoca: también porque genera un ambiente más seco que puede eventualmente causar irritación o inconvenientes respiratorios. Más inteligente es encenderlo unas horas antes de acostarse, esperar a que la habitación alcance la temperatura ideal —que debería estar cerca de los 19º— y luego apagarlo (o programarlo) para cuando se esté en la cama.

Ventiladores

Lamentablemente, los ventiladores son una ilusión. Es decir, no bajan la temperatura ambiental sino que, a través del movimiento del aire, provocan una sensación de frescura. Por lo tanto, no sirven para reducir los grados al interior de la habitación, aunque sí para aliviar un poco la sensación térmica.

“Un ventilador con más potencia dará más velocidad al aire y logrará un mayor alcance; así no será necesario tener que estar abrazado a él para sentir el efecto”, analizaba Del Campo en un artículo pasado sobre ventiladores. “Por otro lado, los que se mueven o pivotan en torno a su eje ayudan a abarcar una mayor área que los que dirigen el aire en una sola dirección”, asegura.

Si no te incomoda dormir con un soplo de aire constante, ni tampoco con el zumbido que provoca el ventilador, hay algunas opciones que podrían hacer tus noches más soportables. Los mejores son aquellos que tienen movimiento, ya que así abarcan más espacio, mientras que los de techo no son tan aconsejables, puesto que no logran ser muy eficientes. El aparato, eso sí, debe inspirar seguridad, sobre todo en temas de circuitos eléctricos, eficiencia energética y resguardo de las aspas.

Los expertos recomiendan ubicarlo en un sector con sombra, donde pueda alimentarse de aire más fresco, sin obstáculos al frente, con la mejor extensión posible y ojalá con una ventana o zona abierta para evacuar al aire caliente.

Ventilador de torre Oster OTF301M


Enfriadores

Esta es una alternativa más novedosa y tecnológica para refrescar. Parecen estufas, pero su función es usar el aire del ambiente, enfriarlo por medio de un contenedor de agua, y devolverlo un poco más fresco. “Efectivamente, consiguen bajar la temperatura”, dice Rodrigo Muñoz, director de las carreras de Electricidad y Energías Renovables del Duoc UC San Joaquín. “Poseen además la característica de aumentar la humedad del ambiente, lo que mejora mucho la sensación térmica”.

Enfriador de aire 65W EVT-2030 Airolite


El truco del efecto termo

Enfriar tu casa no necesariamente implica tener que conectar o encender “algo” para bajar la temperatura. María Luisa del Campo, académica de la U. de Talca, recomienda convertir tu casa en un termo: es decir, “al caer el sol, abrir ventanas y dormir así, cosa que baje completamente la temperatura al interior de las casas. Y al otro día, cuando esta empieza a subir nuevamente, cerrarlas todas, para tratar de mantener esta frescura interior lo más posible, como si fuera un termo”. Para llevar a cabo esta idea, te sugerimos ponerte alarmas o recordatorios en el teléfono para acordarte de hacerlo. Si en un par de días notas la diferencia, tú mismo te darás cuenta si vale o no la pena seguir este truco o mejor invertir en algún aparato.


Ayúdate de las cortinas

El mejor escudo para evitar que lleguen esos insoportables rayos de sol —y así tener más fresca la casa al caer la noche— son las cortinas gruesas y las persianas. De esta forma, nuestra casa se transforma en una pequeña cueva de sombra. Lo que aconsejan los expertos es que sean idealmente blancas, porque así tienen mayor capacidad de reflexión de la luz. Con este color el calor rebota, mientras que las cortinas oscuras provocan el efecto contrario, y absorben el calor en vez de repelerlo.

Cortinas blackout Clems 140 x 225 cm (2 unidades)


Un baño tibio

Cuando el calor no deja dormir, José Luis Castillo, neurólogo del Centro del Sueño de Clínica Santa María, sugiere darse un baño tibio antes de acostarse. “Eso ayuda a controlar la temperatura corporal y facilitar el sueño”. Como te explicamos antes, el agua tibia permite liberar calor paulatinamente y no de golpe, como sucedería con el agua fría. “Ojalá luego ocupar ropa de algodón, que sea cómoda y capaz de absorber el calor”, sugiere. Gema Pérez, médico broncopulmonar de Clínica Dávila.

Protégete de invasores nocturnos

Pérez también hace hincapié en las personas alérgicas a las picaduras de mosquitos, ya que con las altas temperaturas también aparecen en mayor medida estos insectos. Más que insecticidas, lo que ayuda mucho es “tener filtros de mosquitos y zancudos. Los enchufes de repelente también sirven, al igual que las cremas, aunque nunca usarlas directamente en la piel, porque son irritantes. Mejor aplicarlas sobre la ropa”, puntualiza.

Malla antimosquitos con velcro 150 x 130cm


Para un rostro fresco

Si buscas tener al menos un par de minutos de sensación refrescante en el rostro, te sugerimos probar un agua termal, ya que el verano —especialmente en la zona central o precordillerana— reseca la piel. Este pequeño milagro embotellado evita que la piel pierda su elasticidad natural y, al hidratarla adecuadamente, contribuye a combatir el envejecimiento prematuro. Excelente para andar trayendo en la mochila o en la cartera, si se aplica en la noche también ayuda a reducir la sensación de calor.

Agua termal hidratante Avène 150 ml


Una toalla que enfría

Si el calor en tu habitación es demasiado o vienes de afuera y necesitas refrescarte rápido, existe un producto que podría resultar útil. Son las cool towels, o toallas enfriadoras, que funcionan de una forma muy sencilla: tan solo al remojarla en agua fría, escurrirla y agitarla, estará completamente helada. Como están hechas de microfibra, esta absorbe la humedad y mantiene esta sensación por un buen rato.

Toalla de enfriamiento de microfibra Crusec


Botella de agua

Tener una botella de agua contigo es importantísimo, tanto en el día como en la noche. Es común despertarse en la madrugada con la boca seca o mucha sed, y tener una botella a mano evita levantarse al baño y provocar luego un periodo de insomnio. Este modelo de acero es de la línea Typhoon Pure Color y promete mantener los líquidos fríos durante 24 horas. Contiene aislamiento de doble pared y un cuello ancho para colocar cubitos de hielo. La encuentras en color negro, rosado y verde.


Para mascotas

Quienes también sufren con las olas de calor son las mascotas. “Su termoregulación es deficiente, ya que los perros y gatos no tienen glándulas sudoríparas como los humanos, y pueden respirar exclusivamente por las patas o los cojinetes”, explicaba Françoise Arcil, veterinaria especialista en cirugía general y docente en la Universidad Mayor en un artículo sobre mascotas y altas temperaturas.

Pasear sobre el pavimento en plena tarde calurosa puede ser una verdadera tortura para un perro. Si bien existen botitas que podrían aminorar el impacto del calor, no se recomienda sacarlos cuando el sol está arriba. En esos días, lo mejor es hacerlo o muy temprano, o cuando llega la noche.

Las mantas de enfriamiento para mascotas pueden ser el accesorio con el que tu peludo encuentre frescura, también durante las noches. “Cuando el perro se acuesta en estas mantas, su peso hace que las moléculas del gel que contiene se rompan, absorbiendo su calor corporal y disipándolo, bajando la temperatura entre 5 y 10º, aproximadamente”, cuenta Sebastián Venegas, Gerente de CPG y Nuevos Negocios de Falabella.com. Puede ser usada tanto en interiores como exteriores, no necesita refrigeración y, en caso que el cuerpo de la mascota caliente la esterilla, “simplemente se airea para enfriar de nuevo”, apunta. También puede ser útil para animales con dolores e inflamación.

Manta de enfriamiento para mascotas 40 x 50 cm


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 23 de diciembre de 2022. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.

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