Pasivos de Masvida superan los $ 150 mil millones y piden quiebra de Clínica Las lilas

Más de $ 150 mil millones suman los pasivos totales de Masvida a la fecha. La cifra es parte del resultados de los análisis hechos por Southern Cross, a través del due diligence encargado a PWC en marzo de este año, que fue expuesto el jueves a la Superintendencia de Salud, y enviado este viernes a la Fiscalía Oriente.

La cifras corresponden al análisis de los balances 2014, 2015 y 2016 del grupo, y se desglosan en más de $ 100 mil millones en cuentas por pagar, unos $ 20 mil millones en excesos y excedentes de cotizaciones que estarían siendo retenidos por la isapre y más de $ 10 mil millones (unos $ 3 mil millones a $4 mil millones por año) en sub declaraciones del IVA, correspondiente a las cotizaciones sobre el 7%. En este caso, se debe incluso sumar el interés mensual de 1,5% al mes, lo que incrementa la cifra.

Detrás de todo esto hay una serie de situaciones que PWC pudo evidenciar en su auditoria, como por ejemplo el hecho de que la isapre subestimaba nada menos que en $ 9 mil millones el costo médico o las prestaciones de salud que ofrece a sus afiliados, en el período analizado. Pero además, estimó que las sub valoraciones de costo médico -que en definitiva es el valor del cumplimiento de las coberturas de sus afiliados-, probablemente se arrastran de años previos a los analizados, en los que EY (ex Ernst&Young) también auditaba a la compañía.

PWC, pudo evidenciar asimismo que al balance de Masvida le faltaban pasivos, las cuentas por cobrar estaban sobrevaloradas -abultando ingresos-, y existían una serie de Programas de Atención Médica (PAM) sin valorizaciones desde 2014.

Presión de acreedores

A los problemas de la isapre, que hoy trata de salvar el interventor Robert Rivas -de la mano de un eventual traspaso de cartera a Nexus-, se sumó este viernes la solicitud de liquidación forzosa (quiebra) de Clínica Las Lilas por parte de Tanner Servicios Financieros, constituyéndose en la primera petición de este tipo en medio de la crisis. La solicitud fue presentada al primer juzgado civil de Santiago el 1 de marzo de este año, a lo que el tribunal respondió el 28 del mismo mes con una citación a ambas partes a una audiencia el próximo viernes.

Tanner reclama el pago de $708 mil millones, correspondientes a facturas impagas al 28 de febrero de este año, y que forman parte de un contrato de factoring por un monto total de $ 1.059 millones.

La operación fue suscrita en octubre del año pasado, bajo la administración de Eduardo Serradilla, el gerente general de la Clínica que denunció una serie de irregularidades de la administración anterior a su llegada, que derivaron en un impacto patrimonial de $ 23 mil millones.

La situación de la clínica, que hasta antes de la crisis era uno de los activos más importantes del holding, es critica. De acuerdo con conocedores del caso, hoy no cuenta con liquidez suficiente para cumplir con sus compromisos lo que dificulta que pueda pagar a Tanner en la audiencia y con ello frenar la resolución de liquidación forzosa por parte del tribunal.

Al 31 de marzo, Clínica Las Lilas, muestra deudas morosas por $ 3.487 millones, siendo el contrato de factoring con Tanner un 30% del total. En la extensa lista de acreedores de la Clínica, figuran Banco de Chile, con moras por más de $ 600 millones, deudas previsionales con las AFP, y proveedores alimenticios, entre otros.

Ello sin considerar las deudas que tiene con la propia Masvida, que suma varios miles de millones.

La oferta de Harding

En medio de la polémica ICC Farma -ligada a Guillermo Harding, dueño del 40% de Cruz Verde-, ofreció $ 5.000 millones y un aumento de capital de $ 20.000 millones por todas las acciones de Empresas Masvida en la red de clínicas y activos asociados. Harding estima un valor de $ 66 mil millones por las acciones, a la que le resta la totalidad de la deuda financiera (de la que se harían cargo) por $61.000 millones. Eso sí, el precio está sujeto a un nuevo due diligence y a la situación de pasivos de las clínicas al cierre de la transacción, que se estima en unos 60 días. En ese periodo se contempla incluso la reestructuración de los pasivos de Clínica Las Lilas y Clínica Universitaria de Concepción.