La industria de la música independiente va por el gran salto

De los 68 discos finalistas en la categoría Album del Año en los recientes premios Pulsar, prácticamente todos fueron trabajos independientes. Algo similar ocurre al revisar las canciones chilenas más tocadas en radios durante el año pasado, donde, salvo un par de excepciones, no aparecen artistas que actualmente pertenezcan a alguna discográfica multinacional. El panorama está a la vista: durante la última década, y con los cambios en el negocio a nivel global, el sector independiente en Chile ha crecido a tal punto que hoy representa a casi la totalidad de los artistas y las producciones que se publican cada año en el país, desde Francisca Valenzuela y Gepe hasta Los Vásquez o Denise Rosenthal, por nombrar a algunos.

Pero pese a su indiscutible desarrollo todavía existen brechas y debilidades en el área, las que según explican sus propios protagonistas, les impiden poder competir de igual a igual con los llamados sellos “majors”. Ese es precisamente uno de los problemas que intentará subsanar el primer Nodo de la música nacional, un ambicioso proyecto apoyado por Corfo Región Metropolitana y ProChile cuyo objetivo a largo plazo es desarrollar la industria musical independiente del país, que será lanzado oficialmente mañana con un evento al que asistirán diversos actores del sector.

Ejecutado por IMI Chile, la Asociación de Industria de Música Independiente, que agrupa a más de una veintena de sellos, promotores y distribuidores locales, el programa incluye la inyección de $40 millones de pesos para diversas actividades centradas en dos ejes: la profesionalización del área y la expansión internacional de la música.

“Nosotros venimos hace años hablando con ProChile para instalar la marca sectorial, como ocurrió con CinemaChile o Wines from Chile. Ahora logramos coordinarnos con Corfo y ProChile para tratar de terminar con las brechas de exportación que existen en el sector mediante este instrumento”, explica Oliver Knust, presidente de IMI Chile, asociación gremial creada en 2013 que tiene entre sus socios a sellos como Quemasucabeza, Discos Río Bueno y Algorecords, entre otros.

Gepe, Nicole, Juana Fe, Inti-Illimani, Ases Falsos y Como Asesinar a Felipes son sólo algunos de los artistas vinculados a aquellas firmas asociadas.

En el lanzamiento de mañana, además, se presentará la primera fase del programa: un inédito diagnóstico al sector que permitirá generar un programa de fortalecimiento acorde a sus necesidades, y que consigna las fortalezas así como las debilidades que presenta esta industria. Entre éstas últimas figuran ciertas deficiencias administrativas, la falta de capacitación y la carencia de recursos para giras internacionales, lo que los vuelve dependientes del aporte del Estado y los privados.

Entre las ventajas, Sebastián Milos, director de la plataforma Portaldisc -otro de los socios de IMI- destaca la unión y retroalimentación entre los actores de la industria, algo que la distingue de otros gremios y que se traduce en un trabajo colectivo de interdependencia. “Hay que llegar al punto de cosechar todos los frutos que se han sembrado en estos años. El potencial acá es muy grande y Chile está muy bien posicionado afuera”, señala.

“Con este instrumento de fomento queremos, además, vincular a los actores públicos y privados de la economía creativa, para apoyar de manera integral su ingreso a los mercados a través de las distintas líneas de apoyo que impulsamos desde Corfo, ProChile y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes”, detalla Claudia Labbé,  Directora de Corfo Metropolitano.

Destino final

Lejos están los tiempos en que los grandes sellos internacionales invertían grandes sumas de dinero en levantar artistas locales, como en los 90. Hoy, lo masivo es lo independiente. De acuerdo a cifras de la Política de Fomento de la Música Nacional 2016-2020 del CNCA, publicadas en la Encuesta de Consumo Cultural del INE, de los 1.022 discos que se editaron en el país en 2014 un 98% fueron producciones independientes (999 álbumes) mientras que sólo un 2% -22 discos- salió a través de los llamados “majors”, que en Chile representan  Universal Music Group, Sony Music Entertainment y Warner Music Group.

Un escenario que en los últimos dos años se ha polarizado aún más: a la fecha, de esas tres compañías sólo las dos últimas tienen a artistas nacionales en sus filas. Sin contar el extenso catálogo local que poseen y las reediciones, Warner actualmente sólo publica a La Ley -con quienes lanzaron en abril Adaptación-, mientras que Sony edita a Mon Laferte y trabaja con los ex The voice Camila Gallardo y Luis Pedraza. Por lo mismo, según cálculos de IMI el porcentaje que representan ahora debe llegar al  99,7%. ¿Donde está la salvedad? Según el gremio, pese a la abultada diferencia cuantitativa ambas áreas se reparten el 50% de la participación en el mercado.

En ese sentido, uno de los puntos en los que coinciden los protagonistas del sector tiene que ver con capitalizar la diversidad y la buena imagen que tiene la música chilena en el exterior. “Uno de los grandes fines para los que estamos en esto es la internacionalización. Es un objetivo común que ha hecho que todos los sellos hayan unido fuerzas para exportar”, explica Milos, quien es parte de la comitiva chilena que irá a la feria Primavera Pro y al festival Primavera Sound, que se llevarán a cabo en paralelo en Barcelona entre el 1 y 5 de junio.

Según cifras recogidas por Portaldisc, los principales mercados donde actuaron los músicos chilenos en el último año fueron México (21%), Estados Unidos (15%), España (15%)y Argentina (9%). Números que coinciden con las descargas de música local que registra el portal desde el extranjero, encabezadas por Alemania (19%), EE.UU. (16%), España (10%) y México (9%).