La entrega 2024 de los galardones más relevantes de la música chilena ya tiene a sus candidatos. La premiación será en junio y se emitirá por TVN. Revisa aquí los nombres.
6 may 2024 09:10 AM
La entrega 2024 de los galardones más relevantes de la música chilena ya tiene a sus candidatos. La premiación será en junio y se emitirá por TVN. Revisa aquí los nombres.
Ambas bandas, conocidos desde hace décadas, coincidieron este fin de semana en dos puntos de la capital. Los Bunkers fueron los que aprovecharon de bromear con el hecho en sus dos fechas en el Estadio Nacional, donde aludieron con gracia a sus coterráneos.
La banda logró este fin de semana el hito de repletar por partida doble el coliseo de Ñuñoa, lo que sólo habían conseguido Los Prisioneros en 2001. En camarines, el quinteto recibe a Culto y comparte sus sensaciones: "Ojalá este sea un punto de inflexión para el rock chileno", estiman.
Ambos grupos protagonizaron sendos espectáculos en el Movistar Arena y el Estadio Nacional, respectivamente. Un hito sostenido en shows de diferentes características, a tono con lo que se buscaba señalar: la fina competencia técnica y el impecable repertorio de los primeros; el cierre de una gira de reunión de nivel internacional, en el caso de los segundos. Así, desplegaron conciertos que pasarán a la historia de la cultura popular.
La cantante asumió como baterista de la banda desde febrero de este año, y ha acompañado al grupo en el Festival de Viña, el REC y ahora en los dos históricos conciertos en el Estadio Nacional de este fin de semana. En diálogo con Culto reflexiona sobre el hito, su relación con los integrantes del conjunto, el inicio de su carrera y su futuro como solista.
Este domingo 28 el quinteto ingresó a las páginas grandes de la canción chilena al repletar por partida doble el Estadio Nacional, tal como lo hicieron Los Prisioneros en 2001. Su segunda fecha fue casi idéntica al debut, cruzando hits, emoción y alta calidad escénica.
Tanto el cantante como el humorista son amigos cercanos de la banda. Por un lado, Pedropiedra cantó sus antiguos éxitos y temas más recientes, mientras que Copano recicló chistes de El Antídoto y probó otros nuevos, que incluyeron una comparación con Kike Morandé. El comediante promete innovaciones para el domingo.
Desde la reunión de Los Prisioneros, en 2001, que una banda chilena no conseguía desplegar una presentación de alto nivel en el principal recinto deportivo del país. Los penquistas presentaron una ambiciosa puesta en escena, tocando un set de larga duración que incorporó temas clásicos y otros menos evidentes. También una emotiva sección acústica desde el memorial de los desaparecidos, una sorpresiva participación de los personajes de 31 Minutos y un asombroso recuerdo a Víctor Jara. Fue un show que entrará en la historia.
Este fin de semana, las dos bandas más importantes del rock chileno de los últimos 30 años protagonizarán masivos conciertos que se perfilan como los grandes hitos de este año para la escena local. Sus historias en algún punto se cruzaron. Álvaro Henríquez fue un personaje clave en los primeros años de Los Bunkers, como productor musical y mentor. Pero con el tiempo, las trayectorias siguieron sus cursos por otros derroteros y hasta tuvieron un punto de fricción.
Cuesta imaginar a una estrella urbana chilena llenando el Nacional y no por falta de interés de las audiencias locales en el estilo -hace una semana Karol G convocó 180 mil personas durante tres días en el recinto-, sino porque aún la escena carece de nombres sosteniendo una carrera de repercusión transnacional, más allá de éxitos puntuales.
Desde el DTPM incorporarán 11 recorridos de refuerzo en el transporte público, mientras que en Metro cinco estaciones extenderán su horario.
Ha sido la encargada de documentar las imágenes que registran el retorno de la banda más importante del rock chileno de los 90. Pero su bitácora exhibe mucho más. Los Santos Dumont, Camila Moreno y Electrodomésticos son algunos de los nombres con los que ha trabajado. Para la oriunda de Concepción, es clave documentar el potencial creativo de la ciudad y no mirar tanto la capital. Aquí, habla con Culto.
Desde hace meses que la banda y la producción ejecutiva a cargo de La Oreja, han afinado los detalles para sus históricos shows en el coliseo de Ñuñoa. Entre estos se cuentan un gran escenario de 70 metros de largo por 30 de alto, que tiene una larga pasarela de 20 metros que se abre en tres brazos, además 500 luces de iluminación, 600 mts cuadros de pantalla de video y un equipo que registrará todo lo que ocurra. Se trata de un espectáculo ambicioso y de alto nivel para una banda chilena.
Entre etiquetas simplonas (e imprecisas) está aquella de “el Manchester chileno”. Pero los misterios de la ciudad para explicar su prolífica producción musical pasan por dinámicas propias y no imitativas, que están en sus grandes conquistas -como viene siéndolo desde 2015 la impresionante convocatoria del Festival REC-, pero también en gestos más privados y particulares.