La historia detrás del éxito de Bad Bunny

Por tres años consecutivos, Bad Bunny ha sido el artista más escuchado en todo el mundo en la plataforma Spotify. Foto: GQ.

Benito Martínez Ocasio es el artista más aclamado por millones de jóvenes de todo el mundo. Lo cierto es que su camino al triunfo en la industria musical no fue nada sencillo, incluso en gran parte de su infancia no podía escuchar reggaetón porque se lo prohibían. ¿Cómo un joven veinteañero se convirtió en el artista más importante en la industria musical? Esta es la historia de la victoria detrás del intérprete de "Callaita".


No hay nadie que iguale a Bad Bunny en el reggaetón, e incluso otros artistas del género lo han reconocido como tal.

Su nombre es Benito Antonio Martínez Ocasio y hoy es el artista más influyente de la música latina. Lo cierto es que sus éxitos que no paran de sonar en los autos, su ganas de romper los estereotipos de lo que los cantantes hombres deben decir y usar, su carisma y su humor, son solo algunos de los motivos que lo han consagrado como un artista único en su especie.

No por menos lleva tres años consecutivos siendo el artista más escuchado en todo el mundo en la plataforma Spotify -con más de 18.500 millones de reproducciones-, además de ser el primer artista urbano de origen latino en ser portada de la revista Rolling Stone.

Pero, ¿cómo Bad Bunny construyó su historia repleta de triunfos? ¿Cuánto tuvo que pasar para llegar hasta la cúspide musical? Esta es la historia del éxito de Benito Martínez Ocasio.

Una infancia sin reggaetón

Las raíces de Bad Bunny están en el barrio Almirante Sur de Vega Baja, en Puerto Rico. Nació el 10 de marzo de 1994 al alero de una familia clase media, su madre Lysaurie Ocasio era profesora y su padre, Tito Martínez, era chofer. Benie y Bysael son sus hermanos menores, con quienes el artista tiene un gran parecido físico.

En entrevista con la revista GQ, Benito contó que cuando niño era de carácter tímido, pero con un humor y una imaginación envidiables. Curiosamente para ese entonces sus padres no le permitían escuchar reggetón, “lo único que me dejaban escuchar era Vico C”, contó a ese medio.

Ante esa restricción, la salsa y las baladas jugaron un papel significativo en el oído de el “Conejo”. Ya más grande se le permitió escuchar a Tego Calderón, “el primero al que me enganché de verdad”, dijo el cantante.

Para esa etapa de su vida ya comenzaba a presentar los primeros indicios de una carrera musical: participaba en el coro de la iglesia y en el programa de talentos de su escuela.

Si bien presentaba esos signos iniciales de ser cantante, sus padres esperaban otra cosa para su futuro.

“Mami quería que yo fuera un ingeniero, papi quería un pelotero, mi maestra de segundo me dijo que fuera bombero.. Nah, yo vo’ a hacer lo que yo quiero”, canta el artista en la canción Ser Bichote.

Una vez terminado el colegio, Benito ingresó a estudiar la carrera de Comunicación Audiovisual en la Universidad de Puerto Rico. En aquellos años ya escribía sus primeros temas, pero todavía no grababa nada.

“Siempre hice ritmos, pistas, beats. Tenía claro que quería ser artista, pero quería que fuera en serio. En plan, estoy trabajando de verdad. No es que esté aquí tratando de hacer locuras, por eso no subí canciones hasta que me sentí realmente preparado”, aseguró a GQ.

En algún punto del año 2014, el intérprete de Yonaguni entró a trabajar como empaquetador en un supermercado Econo, al mismo tiempo en que estudiaba en la universidad. Allí conoció a Ormani Pérez, quien después se convirtió en su amigo íntimo y DJ oficial. Fue Pérez quien después de varios intentos animó a Benito a subir sus creaciones a la plataforma Soundcloud, lo que finalmente logró.

Tras alcanzar millones de reproducciones en esa red de música en streaming, el artista captó la atención de del sello musical Hear this Music, a cargo de DJ Luian y Mambo Kingz.

De ahí en adelante, solo quedaba esperar.

“Diles”: el punto de partida para el “Conejo”

2016 fue un año mítico para Bad Bunny, porque significó el punto de inflexión donde realmente comenzó a despegar su carrera tras firmar con el sello Hear This Music. También implicó dejar atrás su antigua vida para siempre y no poder volver a caminar por las calles sin ser reconocido.

El single Diles sería el debut escogido para Bad Bunny, contando con la colaboración de artistas de mayor experiencia y nombre como Arcángel, Farruko, Ñengo Flow y Ozuna. Aquel hit llegaría a los oídos de millones de adolescentes y jóvenes, que quedaron encantados con las melodías traperas que caracterizaban esa era inicial del cantante.

El puertorriqueño Bad Bunny tenía una influencia musical más ligada al trap en sus inicios.

Desde que trabajaron en esa ocasión, el “Conejo Malo” y Arcángel han tenido una estrecha relación amistosa y laboral. De hecho, no sería la última vez que los dos artistas colaborarían juntos.

“Yo fui el primero que grabó con él, ese hombre me llamó el día de los padres y me felicitó y me dijo ‘Solamente he felicitado a dos personas el día de hoy, a mi padre y a ti’. A mí se me salieron las lágrimas, porque uno de mis logros más grandes es eso que me acabas de decir, que yo fui el primero que grabó con él, ese es el Grammy que nunca voy a tener y eso es porque él sí se lo ganó y me seguiré ganando un par más porque los artistas que yo conozco son los que recogen los premios”, dijo Arcángel en conversación con el medio Molusco TV.

Luego de eso vendría su éxito en solitario Soy Peor, el que ya a 6 años de su estreno suma casi 400 millones de reproducciones en Spotify.

Entre los 2016 y 2017 la trayectoria musical de Benito estuvo llena de otros singles que solo fueron sumando y sumando victorias, tales como Amorfoda, Me Mata y Tú No Metes Cabra. Pero todavía faltaba algo más: el primer álbum.

X 100PRE

Un día antes de la víspera de la navidad del 2018, Bad Bunny estrenó lo que sería su primer disco de estudio, X 100PRE.

Aquello se dio en un momento difícil para el cantante, pues estaba dejando atrás el sello Hear This Music de DJ Luian y Mambo Kingz. Lo anterior ya que, en sus propias palabras, la compañía no le permitía sacar discos, lo que evidentemente él deseaba hacer.

“Ellos nunca quisieron que yo sacase un álbum, nunca me permitieron, nunca me dieron el apoyo, siempre me lo negaban. Supuestamente el contrato era por álbumes, un contrato que nunca existió. No estoy tirando el mal a nadie aquí, quizás DJ Luian no tiene la culpa, Mambo Kingz tampoco”, aseguró Benito.

Con un pie en la lucha libre y la actuación

No quedando contento con su popularidad en la música, Benito también ha querido incursionar en otras áreas que también le apasionan. El cine es una de esas facetas, ya que en 2021 hizo su primera aparición como actor nada más ni nada menos que en la tercera temporada de la serie Narcos: México de Netflix, encarnando al personaje Kitty Páez.

Este 2022 también apareció junto al aclamado actor Brad Pitt en la película Bullet Train. Y como el cantante es una caja de sorpresas, en abril de este año fue escogido para ser protagonista de “El Muerto”, el próximo spin-off de Spider Man.

Bad Bunny y Brad Pitt en la premiere de la película "Bullet Train".

Desde su niñez, la lucha libre fue otra gran pasión para Benito. Y en 2021, el sueño de debutar como luchador se cumplió: fue parte de WrestleMania 37, uno de los eventos más importantes en la World Wrestling Entertainment (WWE).

Una carrera consolidada

Ya con varios álbumes detrás, entre los que se cuentan OASIS (2019) -con J Balvin-, YHLQMDLG (2020), Las que no iban a salir (2020), El último tour del mundo (2020) y Un verano sin ti (2022), a sus 28 años Bad Bunny ya es un artista que difícilmente será olvidado en la historia de la música.

A los continuos discos que sacó se sumó la gira internacional World’s Hottest Tour, que incluso lo llevó a pisar suelo chileno el 28 y el 29 de octubre de este año. La figura de Benito Martínez flotando sobre una palmera en el Estadio Nacional mientras interpretaba la canción Un coco -cuya pista es producida por el chileno Magicenelbeat-, es una escena que aquellos días quedó en la retina de millones de fanáticos.

Sin embargo, el 2023 será un año donde el “Conejo Malo” espera refugiarse y descansar en su madriguera. Así dijo el cantante recientemente en conversación con Billboard, donde reflexionó sobre lo vertiginoso que han sido estos últimos años de su vida.

“Voy a tomarme un descanso. El 2023 es para mí, para mi salud física, mi salud emocional para respirar, disfrutar mis logros. Vamos a celebrar, vamos para acá, vamos para allá, vamos en el barco. Tengo un par de compromisos esporádicos e iré al estudio, pero no hay presión. Acuérdate de ti mismo, cabrón. Te has roto el culo”, afirmó el intérprete de Neverita.

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