Este plato chileno fue elegido como el mejor guiso del mundo: no es el único en el ranking

Este plato chileno fue elegido el mejor guiso del mundo: no es el único en el ranking.

El portal gastronómico Taste Atlas publicó este miércoles el ranking de los 50 mejores guisos de todo el mundo. El primer lugar lo obtuvo un popular e infaltable plato nacional, mientras que otra comida chilena se ubicó en el 12º lugar.


Taste Atlas, la guía gastronómica que se dedica a reseñar y dar una calificación a las mejores preparaciones que existen entre los países, seleccionó al pastel de choclo como el mejor guiso de todo el mundo.

Para realizar este tipo de selección, Taste Atlas se basa en las notas que ha puesto su audiencia, pero considerando exclusivamente a los usuarios reales.

La lista de los 50 mejores guisos del mundo fue publicada este miércoles y contó con 2.949 calificaciones, de las que 1.895 fueron identificadas como reales. Finalmente el pastel de choclo, que suele consumirse aún más en época de verano, fue destacado en el primer lugar con una nota de 4,7 al ser 5 la máxima.

Pastel de choclo: el mejor guiso de todo el mundo

En su descripción, la reconocida página culinaria planteó que el pastel de choclo es “la comida casera favorita de Chile”, pero que también esta preparación caracterizada por su suavidad y cremosidad es bastante popular en países como Argentina, Perú y Bolivia.

“Se compone de carne molida de res, pollo, aceitunas negras, cebolla, huevos duros y una masa de harina de maíz llamada choclo”, indica.

Para el ranking de comida internacional, el maíz tiene un “papel clave” en esta tradicional preparación que se consume en Chile.

“Como era de esperar, fue adorado por los antiguos incas, cuyo dios más importante era el Dios del maíz. El maíz era tan importante para los incas que su jefe, que se creía descendiente de los dioses, plantaba las primeras semillas de maíz cada año”, reza la descripción.

Adicionalmente, se expresa que los antropólogos creen que el posible origen de este plato se remonta a cuando “los conquistadores españoles contrataron cocineros tribales para que les prepararan una comida como recuerdo de su hogar”.

En ese contexto, los antiguos cocineros habrían puesto la masa de maíz en una preparación un poco parecida a las empanadas, tras lo cual nació el pastel de choclo.

El pastel de choclo es una tradicional preparación en la cocina chilena, que suele acompañarse con azúcar o ensalada de tomate.

Taste Atlas también ahondó en los elementos necesarios que debe tener este plato chileno: “Se incorporan pasas grandes al pastel, mientras que el pastel mismo se espolvorea con azúcar antes de hornearlo, asegurando que se desarrolle una corteza caramelizada en la parte superior. Solo queda disfrutarlo mientras está caliente y consumir un delicioso trozo de historia culinaria”.

¿Y con qué es ideal acompañar el pastel de choclo? Según Taste Atlas, lo ideal es con vino carmènere. Asimismo, las mejores opciones para probar este plato están en restaurantes como Galindo (Santiago), Las Delicias del Carmen (San Pedro de Atacama), La Casona (San Pedro de Atacama) y El Pimentón (Valparaíso).

El pastel de jaiba, otro premiado por Taste Atlas

A la consagración del pastel de choclo a nivel internacional, también se suma el reconocimiento a otro plato característico de Chile: el pastel de jaiba, que se encuentra en el 12º lugar con una calificación de 4,3.

La guía reseñó al pastel de jaiba como “una cazuela de cangrejo chileno decadente proveniente de Santiago, donde se puede encontrar en la mayoría de los restaurantes”.

El pastel de jaiba se ubicó en el 12º lugar de los 50 mejores guisos de todo el mundo.

Luego, cuentan que para hacer esta comida se requiere de “carne de cangrejo, pan sin corteza, ajo, cebolla, leche, chiles, vino blanco, mantequilla, caldo de pescado, crema y especias como comino, orégano y pimentón en polvo”.

También destacan que lo común es que el pastel de jaiba sea horneado en ollas de greda: “Cuando está listo, generalmente se cubre con queso rallado y se sirve con pan y una copa de vino blanco de cuerpo medio”.

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