La proclamación de Piñera en La Araucanía

Piñera está en campaña y en La Araucanía se notó: la publicidad de sus actividades y los gestos hacia las víctimas de la violencia, más en privado, marcaron el tono de su visita. Consiguió, en parte, el objetivo trazado por su equipo, es decir, marcar diferencias con la polémica visita a la zona de la presidenta Bachelet. En su última cita, se retiró entre gritos de proclamación. También recibió críticas, principalmente desde su propio sector.




!Se siente, se siente, Piñera presidente!

El grito apareció tímidamente en el hall principal de ingreso al estadio Germán Becker de Temuco y fue cobrando fuerza cada cierto tiempo. Lo acompañó durante su caminata hacia la salida y sirvió para cerrar una polémica visita de Sebastián Piñera a la Región de La Araucanía, tres semanas después del ya a esta altura famoso viaje de la presidenta Bachelet que terminó en una renuncia no aceptada de su ministro del Interior, Jorge Burgos, por no haber sido informado del periplo.

El ex presidente decidió visitar la región para marcar diferencias con la mandataria: estuvo martes y miércoles y la mayoría de sus actividades fueron públicas, a diferencia de la cuidada y secreta estrategia desplegada por Bachelet.

En el Germán Becker, Piñera reunió a ex autoridades y colaboradores de su gobierno, quienes aprovecharon de resaltar sus opciones de volver a La Moneda en 2018 y proclamarlo a viva voz:

Entre varias actividades mediáticas, Piñera sostuvo un encuentro reservado: se reunió durante gran parte de la tarde del martes con los familiares de las víctimas de la violencia en la región.

Acompañado por sus colaboradores de la fundación Avanza Chile, el ex gobernante se sacó selfies con la gente y recorrió la ciudad: se dejaba ver e incluso llegó caminando a algunas reuniones con distintos actores de la zona.

Publicidad versus secretismo

El viaje de Piñera fue comparado con el que realizó la presidenta Michelle Bachelet hace tres semanas. El trasladado de la mandataria, que fue anunciado esa misma mañana a la prensa y no al ministro del Interior, Jorge Burgos – quien estaba coordinando los diálogos y liderando las iniciativas del Ejecutivo con los residentes de la región – abrió un foco de controversias entre Ana Lya Uriarte y la DC, conllevando a que el jefe del gabinete presentara su renuncia a Bachelet.

Aquietadas esas aguas, la visita de Piñera revivió la controversia, buscando marcar sin embargo, una impronta distinta. El ex presidente anunció con anticipación su traslado, las actividades que realizaría y no solicitó medidas adicionales de seguridad. Este último punto fue particularmente destacado en los comentarios que generó su visita en redes sociales.

El saldo a favor

Distintas fotos y videos publicados por quienes participaron de los encuentros con Piñera reflotan calificativos de "estadista" y agregan que el ex presidente "escucha a las víctimas".

Por su parte, el ex presidente recalcó que "la Araucanía fue durante nuestro gobierno una gran prioridad y preocupación", recordando que recorrió la zona diez veces en los cuatro años de su mandato. Asimismo, acotó que "mi visita a la Araucanía es para aprender, para escuchar, para compartir y después poder hacer el mejor aporte" al gobierno.

Sobre la presidenta Michellle Bachelet, y los cuestionamientos que tuvo en su viaje a fines de 2015, aseveró que "ella tomó sus decisiones, el país ha conocido que hubo mucha discusión al interior del gobierno, del hecho el ministro del Interior presentó su renuncia". "Lo que no podemos hacer es que los problemas del gobierno impidan o dificulten la solución ante los problemas de la gente", sentenció.

Desde la UDI, Hernán dijo en Cooperativa que "es un contraste que la opinión pública puede juzgar. La presidenta de la República tiene que ir en forma clandestina, Sebastián Piñera puede ir mostrando la cara y anunciando con anticipación". También sus ex ministros apuntaron a las diferencias con Bachelet:

Las críticas

La vuelta a la exposición ante la ciudadanía también trajo reacciones adversas para el ex mandatario, entre quienes son críticos a su figura, lo que fue su gestión en La Moneda y sus rivales en la carrera presidencial.

Así, Piñera recibió saludos, pero también insultos en la calle, cuando se dirigía a una reunión con la multigremial de la región, según recogió radio Bíobio.

Desde su propio sector, el ex presidente también recibió reparos a su decisión de visitar la región de la Araucanía. Aun cuando mantienen una buena relación, el senador Alberto Espina (RN) deslizó reproches a la visita de Piñera a la zona a la cual él representa en la Cámara Alta.

"Él es libre de hacer los viajes que estime conveniente, pero si queremos trabajar en unidad y en equipo, lo razonable es buscar días en los cuales todos podamos estar (...) él verá en el momento si quiere o no ser candidato", comentó el martes en el Congreso.

El senador Manuel José Ossandón (RN) también lanzó dardos a Piñera, señalando que, con esto, se confirma que "está haciendo una gira de candidato".

Otro de los opositores a Piñera es Marco Enríquez- Ominami, quien también cuestionó el viaje, afirmando que su presencia allá "empeora" los problemas:

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