Senado aplaza ley de identidad de género y desata polémica

Una dura polémica generó el miércoles el proyecto de ley de identidad de género en el Senado, pues la iniciativa permite que las personas que se identifican con un sexo diferente -incluyendo los menores de edad- puedan consignarlo en sus documentos oficiales obtenidos en el Registro Civil.

La iniciativa fue presentada en 2013 por los senadores Juan Pablo Letelier (PS), Ricardo Lagos (PPD), Lily Pérez (RN) y por los ex congresistas Camilo Escalona (PS) y Ximena Rincón (DC), con el objetivo de reconocer a los transexuales de todas las edades.

Precisamente, ese es el punto de mayor controversia en la Cámara Alta. Hoy, el senador Andrés Allamand (RN) y Jacqueline van Rysselbergue (UDI) se opusieron a que los menores puedan ser reconocidos con una nueva identidad. Según el texto legal que se discute actualmente, los adolescentes de 14 años y menos podrán solicitar su nuevo nombre ante un Tribunal de Familia, lo que debe ser consentido por los padres. Los interesados deben presentar una evaluación sicológica y de acompañamiento. Además, las personas entre 14 y 18 años deberán realizar un trámite en el mismo tipo de tribunal si hay un disenso de sus tutores. Cuando los padres están de acuerdo con el adolescente, se puede acudir directamente al Registro Civil, lo mismo que regirá para los adultos.

Tras postergarse la votación del proyecto en la sala del Senado, será devuelto a la Comisión de Derechos Humanos de esa instancia, donde se le ingresarían indicaciones.

La senadora van Rysselbergue afirmó que los menores de edad deben quedar fuera del proyecto, porque no tienen una definición sobre su sexualidad, pero sí podrían tomar esta decisión quienes tienen entre 14 y 18 años, con un análisis médico de su condición. "La mayoría de las disforias de género que suceden en la adolescencia se revierten. Estas se revierten en un 85%, entonces los jóvenes no pueden acceder a esto sin que tengan ayuda de especialistas", dijo.

Franco Fuica, vocero de Organizando Trans Diversidades, señaló que los legisladores "más conservadores se han negado a discutir esta futura ley, pero hay que recordar que se trata de un tema de derechos humanos".

El dirigente sostuvo que uno de los mayores problemas de las personas transexuales son las dificultades a la hora de encontrar trabajo, pues son cuestionados por su nombre y "tampoco hay un reconocimiento de su identidad en los centros de estudio, de salud y otros".

Luis Larraín, presidente de la Fundación Iguales, explicó que este trámite de rectificación podrá hacerse por transexuales, aunque no se hayan sometido a una cirugía de cambio de sexo. "Lo relevante es que se identifican con un género", dijo.

Añadió que hoy las personas deben acudir a la ley que permite cambiar de nombre, siempre que se mantenga el mismo género. Se estima que unas 200 personas han realizado este trámite, pues no existe esta normativa sobre la identidad.