Rusia pide frenar presiones sobre Siria y rechaza posibilidad de embargo de armas

Rusia, a través de su canciller, Sergei Lavrov, reclamó hoy el fin de las  presiones sobre Siria y rechazó la posibilidad de disponer un embargo de armas sobre Damasco, mientras que Turquía manifestó que  es posible definir una zona de resguardo o colchón si miles de personas intentan huir de la violencia y descartó una intervención militar.

Lavrov, dijo en declaraciones reportadas por las agencias Interfax y Ria Novosti que "lo más  importante es dejar de usar el lenguaje de los ultimátums" y dar un curso político a la situación siria.

El canciller citó la experiencia de Yemen, donde "la  comunidad mundial, manifestando paciencia, insistencia e  influencia sobre todas las partes del conflicto, obtuvo la firma  del plan de paz que ofrece la posibilidad de estabilizar la  situación". El ministro consideró que la violencia en Siria es provocada  más por grupos armados que por las fuerzas de seguridad y el  ejército.

"Los hombres armados tratan en forma muy feroz a los civiles.  Esto no se refiere sólo a las autoridades y en los últimos  tiempos se observan, cada vez más, no tanto las acciones de las  autoridades como de los grupos armados que están provocando  incidentes", advirtió.

Lavrov subrayó que "las propuestas de imponer la prohibición  a la provisión de cualquier tipo de armas a Siria es muy  deshonesta" y dijo que esa iniciativa debe ser analizada a la  luz de la experiencia libia.  En ese sentido, destacó que en el caso libio, pese al embargo del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, hubo países que  aportaron armas a una de las partes en conflicto.

En tanto, fuentes del Estado Mayor ruso citadas por la  agencia Itar-Tass dijeron que naves de guerra rusas se  desplazarán a aguas sirias a fines de diciembre.  Las naves, según esas fuentes, iniciarán tareas en el  Atlántico y el Mediterráneo desde el 10 de diciembre e  ingresarán a puertos sirios.

TURQUIA
En tanto, el canciller turco, Ahmet Davutoglu, dijo en declaraciones  reportadas por la televisión local que la comunidad  internacional puede decidir la necesidad de establecer en Siria  una zona de protección si miles de personas intentan huir de la  violencia. Agregó que Turquía rechaza la opción militar en Damasco, pero de todos modos está preparada para afrontar  cualquier escenario. "El régimen que tortura a su propia gente no tiene ninguna  posibilidad de sobrevivir", manifestó el canciller.

El ministro de Transporte, Binali Yildirim, manifestó que  Turquía hará pasar el transporte comercial a Medio Oriente a través de nuevos pasos en la frontera con Irak si empeora la  violencia.

Un comité de la ONU dijo ayer que el Ejército y las fuerzas de seguridad sirias habían cometido delitos contra la humanidad que incluían asesinato, tortura y violación, y pidió un embargo de armas contra el país.

Moscú ha sido uno de los principales proveedores de armas de Damasco, según detalla la agencia Reuters.