Karissa Lindstrand, pescadora de langostas en Canadá, se encontró con un inusual espécimen mientras revisaba las redes del bote en el que trabaja: Una las langostas atrapadas tenía una extraña marca azul en una de sus pinzas. 

De acuerdo a Lindstrand, reconoció enseguida la marca como una parte del logo de Pepsi.

"No puedo saber cómo llegó ahí. Parece más un tatuaje o un dibujo que algo que creció en él", indicó a CBC News. Según explicó, es una gran fanática de la bebida y toma alrededores de 12 latas diarias, así que fue fácil para ella reconocer la imagen.

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Algunos de los pescadores tienen la teoría de que quizás una lata o cartón de Pepsi se quedó pegada en la langosta cuándo éste crecía, lo que provocó que el crustáceo creciera alrededor de esta basura quedando marcado.

Según Lindstrand, este suceso da cuenta de la cantidad de basura que existe en el mar producto de la contaminación de las personas.  Cada año se botan entre 5 y 13 millones de toneladas de plástico al océano.