Los cinco atentados que han afectado a unidades de Carabineros en 2014
Desde explosivos de alto poder hasta bombas molotov han sido utilizados para atacar unidades de la policía uniformada en lo que va de este año, en la Región Metropolitana.
El año nuevo de este 2014 comenzó con un atentado a una unidad de Carabineros.
La noche del 1 de enero, desconocidos colocaron una bomba de alto poder de fuego en la puerta de la oficina del prefecto de la zona Oriente, lugar donde también se ubica la 18ª Comisaría de Ñuñoa.
Se trataba de una olla a presión, que contenía cinco kilos de pólvora, clavos, gas butano y parafina, con un sistema de activación de relojería eléctrico, con fuente de poder de pilas, el que, según fiscalía, afortunadamente no detonó porque falló uno de los dispositivos, pero pudo causar un gran daño.
Bomba hallada en Comisaría de Ñuñoa es similar a la que detonó en el atentado del maratón de Boston
Durante la madrugada del pasado 6 de febrero, un vehículo particular estacionado al costado de la 21a comisaría de Estación Central, fue blanco de un ataque incendiario por parte de desconocidos.
Personal de guardia de la comisaría se percató del hecho ocurrido pasadas la 1.20 de la mañana, en la avenida Ecuador con General Velásquez, e intentaron extinguir las llamas.
Tras el trabajo realizado por el Grupo de Operaciones Policiales Especiales (GOPE) se logró detectar dos botellas de combustible activadas con fuego directo, bajo el automóvil.
El 11 de julio de este año, un artefacto detonó cerca de la medianoche en el exterior de la 44º Comisaría de Lo Prado, ubicada en avenida San Pablo.
El atentado provocó daños menores a un portón del cuartel, y afectó los vidrios de un jardín infantil colindante a la unidad policial.
Según los primeros peritajes realizados por la propia institución, el elemento estaba compuesto de un extintor relleno con pólvora.
Durante la noche de ayer lunes la Primera Comisaría de Santiago y la 39° Comisaría de El Bosque fueron blanco de atentados explosivos.
En el primer caso, la detonación del artefacto causó daños en vidrios de lugares cercanos y en ambos ataques los dispositivos contaban con un sistema de relojería para su denotación.
El fiscal regional de la zona Sur, Raúl Guzmán, explicó que los dos eran similares, pues estaban compuestos de pólvora negra "en un contenedor que es un extintor como se ha visto en muchos otros atentados con anterioridad a unidades policiales, como también a bancos. Es el mismo tipo de artefacto".
En estos hechos, se realizó control de identidad a tres personas, quienes quedaron en libertad, pues, "voluntariamente se sometieron a peritaje científico a vestimentas que dieron resultado negativo", dijo Guzmán.
Según el fiscal, los artefactos eran de alto poder explosivo.
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