Liga Arabe continuará labor en Siria pese a retiro de algunos observadores del Golfo Pérsico

El segundo al mando del organismo afirmó que el protocolo de la misión se extendió temporalmente hasta el 24 de enero. A su vez, el régimen sirio dijo que el plan árabe, supone una flagrante intervención en asuntos internos.




Pese a que algunos países del Golfo Pérsico decidieron retirar a algunos de sus observadores que mantiene en Siria, la Liga Arabe afirmó que continuará adelante con su misión en dicho país, según lo manifestó el segundo al mando del organismo, Ahmed Ben Helli.

"La misión continuará su tarea ahora porque el protocolo se ha extendido temporalmente hasta el 24 de enero", indicó Helli en El Cairo según recoge la agencia Reuters.        

La Liga Arabe, que decidió el domingo extender la misión, estaba esperando que el gobierno de Siria aceptara la extensión. Quedan 110 observadores árabes en Siria, después de la retirada de 55 miembros de países del Golfo. Al mismo tiempo solicitaron una reunión con el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, para analizar los nuevos pasos a seguir sobre la base de una propuesta que cuente con el apoyo del Consejo de Seguridad.

SIRIA RESPONDE
En este escenario, el canciller sirio Walid al Moallem, dijo hoy que el nuevo plan de la Liga Arabe busca internacionalizar el asunto sirio al pedir una acción más efectiva de la ONU.
Los árabes sabían que "no lo aceptaríamos", dijo. El plan es vergonzoso y "viola la soberanía de Siria e interfiere en sus asuntos internos", destacó Al Moallem.

La Liga Arabe pidió el domingo pasado al Presidente sirio, Bashar al Assad, delegar el poder en su vicepresidente primero para que liderara un gobierno de unidad nacional en una iniciativa nueva destinada a poner fin a la crisis política en el país.

De acuerdo con la iniciativa, anunciada después de una reunión de ministros de Relaciones Exteriores árabes, debe formarse un gobierno de unidad nacional dentro de dos meses con la participación de la oposición para preparar las elecciones presidencial y parlamentaria bajo la supervisión de los países árabes y de la comunidad internacional.

En el plan se urge al gobierno sirio a que prepare un proyecto de Constitución que será aprobado a través de un referéndum popular, y demanda a Assad que delegue todos sus poderes para permitir que el gobierno de unidad nacional actúe en el periodo de transición, apunta Xinhua.

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