Las inéditas declaraciones de las bailarinas del Passapoga y el club Diosas sobre Rafael Garay

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Los policías de la causa entrevistaron a trabajadores de los locales que habían compartido con el ingeniero comercial. Las descripciones apuntan a que era un cliente frecuente, que gastaba altas sumas de dinero y que tenía afición por el vodka.




Fue un interrogatorio nocturno. El 30 de septiembre, a eso de las 1 de la mañana, un grupo de efectivos de la PDI acudieron al Passapoga y a Diosas, dos clubes nocturnos de Santiago. El motivo: entrevistar a bailarinas y trabajadores del local sobre el comportamiento de Rafael Garay, el mediático ingeniero comercial que en esos días había sido denunciado por una presunta estafa del tipo piramidal.

De acuerdo a un informe contenido en la causa, el Passapoga fue el primer local que visitaron. Allí, "se procedió a entrevistar al administrador, garzones y bailarinas del club nocturno determinando que Rafael Garay Pita era un asiduo cliente desde más de 4 años" y que "lo describían como un cliente que gastaba entre 300 a 800 mil pesos, las veces que iba, bebedor de vodka, le gustaba reunir a varias chicas e invitarlas al unísono".

Además, el reporte dice que hablaron con una de las bailarinas, sindicada como la favorita de Garay, que indica que "respecto a su enfermedad se habría enterado por la prensa y éste le mostró una cicatriz que tenía en su cabeza".

Tras las entrevistas, los policías fueron al club Diosas. Allí, las versiones sobre el ingeniero comercial fueron similares: los trabajadores señalaron que "era un cliente frecuente, donde tenía varias señoritas favoritas, con quienes gastaba más de un millón de pesos por noche".

El informe continúa señalando que se identificó a tres de ellas, y que "una de ellas (de raza negra) confirmó haberse reunido en varias oportunidades con él fuera del local, llegando a tener una seudo relación, pero no prosperó debido a que Garay Pita no le daba dinero ni le compraba nada, sólo era generoso en el local".

Las otras dos entrevistadas, en tanto, sostuvieron que Garay era "un sujeto raro, alcohólico (bebedor de vodka y cerveza), un caballero sin alcohol, pero con éste en el cuerpo un tipo agresivo (sic). También, dudan de su sexualidad, puesto que siempre las invitaba a consumir tragos en el local, pero no las tocaba y tampoco las invitaba a salir del mismo".

El reporte cierra señalando que además "se logró individualizar a otras mujeres que supuestamente habrían salido con Rafael Garay, quienes estarían trabajando en los night club Palominos y Lucas Bar".

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