La versión de la Mandataria sobre el origen de la compra

"Resulta que el año 2013 yo conocí una enfermera que tiene un centro de meditación y me contó de este lugar en La Higuera, donde ella tiene su centro, y donde obviamente la familia de mi hijo (Sebastián Dávalos) también estaba interesado en comprar algo como una cosa recreativa. Y yo decidí comprarles algo a mis hijas, y que yo financié obviamente, que yo la pagué". Así comienza el relato de la Presidenta Michelle Bachelet, quien decidió ayer salir a explicar y responder preguntas sobre la compra del terreno por parte de su hija Sofía Henríquez.

Tras su declaración, uno de los periodistas enunciaba su pregunta ("Presidenta, este negocio...") cuando la Mandataria interrumpió con vehemencia: "No es negocio, eso no es negocio".

Otro periodista contraatacó: "¿A su nuera (Natalia Compagnon) es lo único que le compró?".

"No, ella decidió comprar para ella, su familia, y ofreció a un montón de personas y nosotros dijimos sí. Pero la persona que me habló de esto fue una enfermera que tiene un centro de medicina alternativa en Santiago y que además tiene este centro de yoga, meditación, etc. Y me contó que había este señor (Patricio) Godoy que vendía unos lotes. Que era un lugar muy místico, lleno de buenas vibraciones", dijo la Mandataria ayer.

Pese a decir que la información publicada "no es verídica", la Presidenta no desmiente los antecedentes revelados en la publicación del domingo: "Es verdad que ella (Sofía Henríquez) tiene a su nombre un terreno, pero que yo lo compré y lo puse a nombre de mis hijas. Entonces, la pregunta que de dónde sacó la plata y no sé qué. No, si yo lo compré".

Según los documentos del Conservador de Bienes Raíces de La Serena a los que accedió La Tercera, Natalia Compagnon compró dos lotes de terreno en agosto de 2013 y otros diez en enero de 2014. Luego, según el documento firmado ante el notario interino de La Cisterna, Claudio Herrera Moraga, el 24 de marzo de ese año vende uno de ellos a Henríquez. "El precio de venta es de $6.500.000, pagaderos por parte de la compradora en este acto al contado y en dinero en efectivo, suma que recibe la parte vendedora a su entera conformidad", dice el documento firmado por Compagnon y Henríquez. Los nombres de Bachelet o su otra hija, Francisca Dávalos, no figuran en la escritura de compraventa.

En la rueda de prensa a Bachelet le consultan: "¿Usted le compró a Natalia Compagnon o al señor Patricio Godoy?".

"¿De verdad usted cree que es importante eso?", dice Bachelet, antes de volver a entrar en el detalle de la operación: "Yo dije a la enfermera que yo estaba interesada por ese terreno, entonces Natalia hizo el trámite, compró y después yo le pase la plata y se traspasó a nombre de mis hijas, porque yo quería que mis hijas pudieran tener algo al lado de mis nietos".

Ante una nueva consulta, la Presidenta volvió a entregar más antecedentes: "O sea, ella (Compagnon) compró porque ella tenía el nexo con la enfermera y yo la conocí a ella (la enfermera) en la casa de ella (Compagnon). De verdad, yo creo que son detalles que francamente no tienen nada que ver".

Aunque no la nombró, Bachelet podría referirse a la enfermera experta en biomagnetismo Adriana Rubio, con terrenos en la zona. La profesional no quiso confirmar o desmentir la información.