Fidel Castro tilda de "alcohólicos" y "enajenados" a George W. Bush y Yeltsin

El ex presidente cubano emitió duros términos en contra de los ex mandatarios de EEUU y Rusia en una nueva entrega de su columna "Reflexión".




El ex Presidente cubano Fidel Castro calificó de "alcohólicos" y "enajenados" a los ex mandatarios de Estados Unidos y de Rusia George W. Bush y Boris Yeltsin, respectivamente.

En una nueva "reflexión" publicada anoche, Castro tilda primero de "alcohólico sin tratamiento" a Bush, a quien acusa además de carecer de los "más elementales principios éticos" y de haber ganado la presidencia en 2000 en una elección "fraudulenta".

"Un proceso electoral fraudulento garantizó el despojo de la presidencia del país más poderoso a favor de George W. Bush, un alcohólico sin tratamiento médico ni los más elementales principios éticos", comentó el histórico líder cubano en el texto publicado en el portal oficialista Cubadebate. "Semejante enajenado, a través de una maletica, podía decidir (sobre) el uso de miles de armas nucleares", agregó.

También Boris Yeltsin es descalificado duramente por Castro. "En el lado opuesto de la superpotencia yanqui, otro enajenado, con tres botellas de vodka en el estómago, proclamó la desintegración de la URSS (Unión Soviética)", apuntó el líder cubano sin mencionar directamente al ex presidente ruso.

El republicano Bush fue un marcado antagonista del gobierno castrista durante su presidencia, como muchos de sus predecesores. El ex presidente estadounidense, que derrotó en una controvertida elección al demócrata Al Gore en 2000 y que ordenó la invasión de Irak en 2003, padeció de alcoholismo en su juventud.

Yeltsin, el primer presidente ruso tras la disolución de la Unión Soviética en 1991, también tuvo problemas con el alcohol y se le llegó a ver ebrio en público en los años finales de su presidencia.

En su reflexión titulada "La necesidad de enriquecer nuestros conocimientos", Castro también recuerda encuentros con enviados del Vaticano antes de su reunión con el Papa Juan Pablo II en 1998.

"Para compartir la amistad no hay que compartir las creencias", apuntó el líder cubano sobre sus buenas relaciones con el ex portavoz vaticano Joaquín Navarro Valls. Castro, que se declaró ateo y llegó a ser excomulgado en 1962, mantiene buenos vínculos con la Iglesia católica sobre todo tras la visita de Juan Pablo II a la isla.

El ex presidente cubano, de 85 años y retirado de la política activa desde 2006, se reunió el pasado miércoles con Benedicto XVI durante la visita del pontífice a Cuba.

"¿Qué hace un Papa?", fue una de las preguntas que le hizo Castro a Benedicto durante una conversación distendida de una media hora, en la que también bromearon sobre su edad y su condición de "coetáneos". El Papa alemán cumple 85 años dentro de un par de semanas.

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