Diego: "La bandera ya no significa nada"

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El internacional brasileño, conquistador de la Intercontinental con el Porto, de la Europa League con el Atlético, una estrella, pisará esta noche San Carlos de Apoquindo.




Una estrella mundial en Chile. El brasileño Diego Ribas (32), que despuntó desde muy joven en el Santos de principio de siglo, ha pisado los pastos más importantes del mundo: Portugal (Porto, con el que ganó la Intercontinental 2004), Alemania (Werder Bremen y Wolfsburgo), Italia (Juventus), España (Atlético de Madrid, con quien se proclamó campeón de la Europa League tras golear al Athletic de Bielsa), Turquía (Fenerbahce)... Pero en julio de 2016 decidió volver a casa y Flamengo le abrió las puertas. Hoy, a partir de las 21.45 en San Carlos de Apoquindo, Universidad Católica desafiará al grande de Brasil, quien en sus filas cuenta además con joyas como Paolo Guerrero y Leandro Damiao. Antes, Diego, como se le conoce en el fútbol, atiende a La Tercera.

Un golazo suyo en el Camp Nou en 2014 eliminó al Barça de Martino en la Champions 2014 y dio la vuelta al mundo. Jugó Champions League y Copa Libertadores, ¿cuál prefiere?

Creo que la Champions, porque acaba de estar un poco en la frente de todos. Por el impacto que tiene a nivel mundial es la más importante. La Libertadores es el máximo escenario en la región. Y todos los jugadores, inclusive las grandes estrellas mundiales de fútbol europeo, deberían sentir esa sensación de participar en una Libertadores. Es muy placentero.

Y más si se participa goleando. Su Flamengo viene de impresionar con una paliza a San Lorenzo. Usted anotó un tanto y participó en los demás. ¿Son el gran favorito a ganar la Libertadores?

La victoria ante San Lorenzo fue sólo el comienzo. Pese a ese resultado, somos conscientes de que es un campeonato equilibrado. De momento, el objetivo es clasificar.

¿Ése es sólo el objetivo?

No, los objetivos son muy altos. Pero yo prefiero vivir la situación paso a paso. En este momento, el primer objetivo es clasificar a la siguiente fase de la Libertadores y a partir de ahí vamos a evaluar nuevamente. Tengo mucha confianza de que será posible.

El partido a partido que decía Simeone. ¿Qué conoce de Católica?

Asistimos a su partido ante Atlético Paranaense en la fecha anterior y vimos un equipo muy bien organizado, con jugadores capaces de decidir el partido en una jugada. Es un equipo que tiene mucha garra y determinación. Será un juego muy difícil.

¿Y de Chile? ¿Qué le ha parecido la evolución de su fútbol con Bielsa y Sampaoli?

Sin duda, Sampaoli hizo un trabajo extraordinario con la selección chilena. Le dio una mecanización, todo lo que sucede en la situación de jugadas, de sistemas, es realmente algo para admirar. La selección chilena es una de las más fuertes de América Latina y del mundo. Yo la enfrenté algunas veces y siempre era un juego difícil, por jugadores habilidosos y rápidos.

Entre sus buenos momentos. ¿Cómo recuerda la Copa Intercontinental con Porto?

Es un recuerdo muy importante para mi vida. Gracias a Dios en cada club que pasé tuve grandes momentos, en algunos más y en otros menos. Llegar a disputar esa final intercontinental con Porto fue un sueño. Estar en esa final fue muy satisfactorio. Sin dudas que fue un juego muy difícil y acabamos venciendo por penales. Fue un momento muy especial, que guardo con mucho cariño.

¿Y el peor?

Un jugador tiene momentos de dificultad, que ayudan mucho. Si fueran sólo victorias no tendría gracia. Conmigo no fue diferente, porque yo viví momentos difíciles. Tal vez el más complicado fue cuando no conseguimos clasificar a Atenas 2004, fuimos eliminados en el preolímpico (se disputó en Chile ese mismo año). Allí sufrimos muchas críticas y yo, como uno de los principales jugadores de la Selección, fui muy criticado. Fue un momento muy difícil, pero sirvió de aprendizaje para mi vida.

¿Ve preparado a Brasil para ir a Rusia por su sexto título?

Brasil está viviendo un momento muy positivo. Y claro, siempre que se disputa un Mundial, Brasil entra como favorito. Pero sabemos que hoy en día la bandera ya no significa nada. Los jugadores tenemos que probar la fama dentro del campo. Existen otras selecciones que también entran como candidatas. La realidad es que mucho trabajo y mucha entrega es la fórmula en la que se debe pensar para triunfar.

Y ahora con más cupos para entrar a un Mundial, ¿Qué le parece?

Esa decisión termina aumentando la posibilidad de jugar. Personas que nunca disputaron un Mundial tienen una oportunidad. Futbolistas de altísimo nivel que nunca participaron de una Copa del Mundo aumentarán la posibilidad de jugar. Por ese lado es una decisión positiva.

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