Una ecuación matemática que permite describir el modo en que el cerebro hace fluctuar la autoestima de acuerdo al juicio de otras personas fue descubierta por científicos de la University College de Londres.

Los resultados de la investigación, que podría ayudar a identificar cuándo las personas están es riego de padecer enfermedades psiquiátricas, fueron publicados en la revista eLife.

"La baja autoestima es un factor de vulnerabilidad para muchos problemas de naturaleza psiquiátrica, como la ansiedad, la depresión y los desórdenes alimentarios", explicó el coordinador de la investigación, Geert Jan Will.

"Identificamos exactamente qué sucede en el cerebro cuando la autoestima aumenta o disminuye. Esperamos que este descubrimiento pueda ayudarnos a comprender cómo se desarrollan los problemas mentales, mejorar los diagnósticos y el tratamiento", explicó Will.

La fórmula de la autoestima fue alcanzada a través de un experimento que involucró a 40 voluntarios, a quienes se les pidió cargar su perfil en una base de datos online en la que recibieron los "me gusta" de 184 desconocidos (en realidad, fueron juicios elaborados por un algoritmo).

Durante la prueba, sus cerebros fueron monitoreados con resonancia magnética, mientras el nivel de autoestima fue evaluado a través de un cuestionario.

"Descubrimos que la autoestima oscila no solo a través del juicio de los otros, sino sobre todo en base a nuestras propias expectativas sobre las valoraciones de los otros", señaló Will.

Los niveles más bajos, de hecho, se alcanzan cuando recibimos un juicio negativo de personas a quienes creíamos poder agradar.

Este efecto fue reproducido en un modelo computarizado y contrastado con las imágenes del cerebro tomadas con la resonancia magnética.

Se observó que las personas con autoestima más fluctuante manifiestan más fácilmente síntomas depresivos y estados ansiosos. Su cerebro reacciona a los juicios inesperados de manera particularmente vivaz en dos regiones involucradas en el aprendizaje y en la valoración: la ínsula y la corteza prefrontal.