Gobierno enfrenta las críticas por regreso de los toldos azules al barrio Meiggs

Barrio Meiggs, calle Conferencia, la tarde del miércoles 4 de octubre de 2023.

El regreso del comercio ambulante a la tradicional zona, y que ha provocado la amenaza latente de fuga del comercio establecido, da cuenta de que el plan de las autoridades, hasta aquí, no ha dado resultado.


“Queremos dar la señal de que efectivamente esto no va a ser una intervención de un solo día, sino que pretendemos que sean soluciones sostenibles en el tiempo y que permitan recuperar los espacios públicos de todos y de todas”.

De esa manera la delegada presidencial de la Región Metropolitana (RM), Constanza Martínez, anunciaba el 31 de mayo de 2022 la intervención del emblemático barrio Meiggs y que buscaba recuperar aquellos espacios públicos tomados por el comercio ambulante, crimen organizado y mafias que solo 19 días atrás habían provocado la muerte de la periodista Francisca Sandoval producto de un tiroteo.

Y pese a que en su momento transeúntes y la comunidad comercial de la zona valoraron el trabajo coordinado entre la Subsecretaría del Interior, Carabineros, PDI, Aduanas, Servicio de Impuestos Internos y los municipios de Santiago y Estación Central, que durante el primer mes provocó una sensación de nuevos bríos, lo cierto es que hoy, a casi un año y medio de ello, pareciera ser que la promesa no prosperó.

Tal como evidenció La Tercera este sábado, cerca del 20% del comercio chino de barrio Meiggs ha decidido migrar del sector -incluso del país- debido a la escalada de violencia y los “toldos azules” que han regresado y amenazan seriamente la estabilidad del comercio establecido. “Hoy nos quedamos con 800 distribuidoras en el sector, antes doblábamos el número. La economía bajó mucho y lo social está peligroso. Se necesita una solución”, contó Iping Xu, presidente de la Asociación Gremial de Empresarios Chinos en Chile.

Pero, ¿qué falló en el plan? ¿Quiénes resultan responsables? Esas fueron las interrogantes realizadas a la delegada presidencial de la RM, quien se limitó a responder que este “no ha sido un camino fácil y que debemos insistir una y otra vez como entramado del Estado, pues aún queda mucho por delante”.

Sin referirse a la vuelta de los toldos azules en Meiggs, la autoridad metropolitana asegura que sí ha habido otras intervenciones a lo largo de la capital exitosas, como Plaza de Maipú y San Bernardo, donde “los resultados se han mantenido a la fecha. Además, estamos evaluando alternativas de inversión en Meiggs con Subdere y hemos avanzado en el funcionamiento del Cesfam y del transporte público”.

Desde Carabineros, en tanto, afirman que los operativos en la zona se han mantenido hasta la fecha, lo que ha resultado en la realización de más de 4.100 controles preventivos y 262 detenciones por diversos delitos, así como también se han desbaratado bandas que operaban en el sector. Pese a que desde la policía uniformada han declinado informar un total de efectivos policiales en la zona, sí confirman que en el sector trabajan a diario personal territorial de Control de Orden Público y de las Secciones de Investigaciones Policiales (SIP), sumados en ocasiones a unidades especializadas como OS-9 y OS-7.

Las áreas que hasta ahora concentran gran parte de las fiscalizaciones son Alameda con Meiggs, San Alfonso con Salvador Sanfuentes, Bascuñán Guerrero y Exposición con Sazié.

Consultados por una explicación ante el retorno del comercio ilegal al sector, además de una evaluación del plan a más de 16 meses de su anuncio, desde la Subsecretaría del Interior, liderada por Manuel Monsalve, derivaron las consultas a la Delegación Presidencial, pese a que desde un comienzo fue el propio subsecretario quien comunicó la estrategia como una medida para recuperar la “presencia del Estado con decisión, para garantizar seguridad pero también para dar la señal que estamos disponibles a actuar en conjunto, de manera unitaria”.

Con todo, cercanos a Carabineros creen que el comercio ambulante no terminará solamente con una mayor dotación de efectivos, pues este, creen, no es un problema policial sino transversal para el que se necesita apoyo de todos, además de un cambio en la legislación que tipifique el comercio ambulante como un delito y no como una falta.

En tanto, según sostienen desde la PDI, a ellos solo les compete dar cumplimiento a las instrucciones que imparten las distintas fiscalías. Así, ejemplifican que los resultados de este trabajo “se han visto reflejados en las investigaciones por disparos injustificados y desmanes ocurridos en el barrio Meiggs, en la cual se logró la detención del autor” del crimen que terminó con un ciudadano chino muerto la semana pasada. A esto agregan que con ocasión de otros delitos cometidos en el sector, como homicidios y tráfico de drogas, la PDI mantiene una presencia activa en el lugar, a través del trabajo realizado por la Brigada de Homicidios Metropolitana.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.