Los vuelos a Europa vuelven a ser baratos

Volar a Europa en 2024 sin gastar una fortuna está en las opciones después de una larga racha de precios altísimos.

Las aerolíneas han añadido nuevas rutas entre EE.UU. y Europa y han anunciado planes para aumentar los vuelos en algunas rutas la próxima primavera y verano. La capacidad adicional significa que los viajeros pueden descansar de la racha de tarifas aéreas elevadas de los últimos años. Algunos precios siguen siendo altos: el costo promedio de un billete de avión de ida y vuelta a Barcelona supera los 1.000 dólares, según el sitio web de búsqueda de viajes Kayak. Pero ahora existen ofertas que antes no existían, y los observadores de la industria dicen que esperan que haya más por venir.

“Todo el mundo quería ir en Europa el verano pasado y la mayoría lo hizo,” dijo Kyle Potter, editor ejecutivo del blog de viaje Thrifty Traveller. “Y pagaron mucho para hacerlo.”

Algunas tarifas aéreas se sitúan en niveles prepandémicos o por debajo de ellos, según un análisis reciente de los precios de los vuelos realizado por Thrifty Traveler. Un vuelo sin escalas en clase económica básica a principios de marzo de Boston a Dublín puede costar tan solo 433 dólares. Puede encontrar precios económicos básicos para vuelos desde EE.UU. a las principales ciudades como París, Roma y Ámsterdam por alrededor de 500 dólares durante ese mismo período.

Reservar asientos premium con millas para vuelos la próxima primavera y verano también parece ser cada vez más fácil, dice Potter, otra señal de la caída de la demanda.

Y los asientos más baratos no son sólo en clase turista. Thrifty Traveler encontró casos en los que se podían reservar asientos transatlánticos de clase ejecutiva por menos de 2.000 dólares, incluso en vuelos de JetBlue desde Boston y el aeropuerto Kennedy de Nueva York a Dublín. Eso es aproximadamente la mitad de lo que costaron el verano pasado.

John Grant, analista jefe de la firma de datos de viajes OAG, señala que menos viajeros buscan cabinas premium hacia Europa, un cambio con respecto al gasto de revancha común en 2022. Grant atribuye esto a que más viajeros sienten turbulencias económicas.

Los precios no son universalmente bajos, pero buscar el mejor precio ahora y en los próximos meses puede resultar rentable para los viajes transatlánticos el próximo año.

Una revisión de precios realizada la semana pasada por Thrifty Traveler encontró que era posible reservar vuelos de ida y vuelta a Barcelona desde varias ciudades de EE.UU. por menos de 500 dólares para vuelos en fechas seleccionadas desde ahora hasta mayo. Los precios a Barcelona no siempre son tan bajos. En promedio, el costo de los vuelos a Barcelona la próxima primavera y verano aumentará actualmente un 21% año tras año a 1.043 dólares, según datos de Kayak. El análisis de Kayak se basó en los precios anunciados del mes pasado.

El costo medio actual de un billete de avión de ida y vuelta a Europa es de unos 655 dólares, según datos de la empresa de reservas de viajes Hopper. Los precios siguen siendo especialmente altos para los destinos del sur de Europa.

Las tarifas aéreas a Atenas aumentaron un 22% año tras año para viajar entre mediados de marzo y finales de mayo, según Kayak. Los precios también aumentan un 20% o más en los vuelos a Lisboa, Madrid y Milán.

Las aerolíneas están ampliando el número de vuelos que operan a través del Atlántico, lo que podría reducir los precios, dice Hayley Berg, economista principal de Hopper. Varias aerolíneas de bajo costo, incluidas PLAY y Norse Atlantic, han comenzado a volar entre Estados Unidos y Europa en los últimos años.

Volar con una aerolínea de bajo costo a menudo requiere una escala en lugares como Reykjavik en Islandia. Estas ofertas podrían valer la pena añadida. “Puedo imaginar aeropuertos mucho peores”, comenta Kerry Tan, profesor asociado de economía en la Universidad Loyola de Maryland, que estudia los precios de las aerolíneas.

Muchas nuevas rutas sin escalas que se lanzarán en los próximos meses podrían generar precios más bajos. United Airlines ha aumentado su capacidad transatlántica en un 30% desde 2019, dijo el director comercial Andrew Nocella durante una llamada con analistas en octubre.

United agregará un segundo vuelo diario entre Newark, Nueva Jersey y Bruselas en marzo y un segundo viaje diario entre Washington, D.C. y Roma en mayo, entre otras ampliaciones de rutas. La aerolínea también inicia su servicio estacional a destinos en el sur de Europa antes que en años anteriores.

La aerolínea alemana Lufthansa está agregando vuelos a Frankfurt desde Minneapolis y Raleigh-Durham, Carolina del Norte, a partir de principios de junio. JetBlue recientemente comenzó a vender boletos para vuelos la próxima primavera y verano desde Boston a Dublín y desde Nueva York a Dublín y Edimburgo.

Saber cuándo reservar su billete es clave para conseguir una oferta. Reservar viajes de verano ahora puede no ser lo ideal.

“Las aerolíneas saben que los viajeros que reservan con tanta antelación están ansiosos o no son flexibles”, afirma Berg. Ella espera que los precios de los vuelos internacionales de primavera y verano bajen en los próximos meses.

Sugiere reservar en enero para viajes de primavera y en marzo para viajes de verano. Sin embargo, no espere demasiado: las personas que compren vuelos de verano a Europa en mayo probablemente tendrán que pagar más, dice Berg.

Si los viajeros son indiferentes sobre dónde viajan, las búsquedas abiertas de vuelos en sitios como Kayak o Google podrían generar gangas. De lo contrario, los viajeros deberían configurar alertas de precios para seguir hacia dónde se dirigen los precios.

Saber cuándo viajar, y qué lugares evitar, también ayuda.

Los Juegos Olímpicos de París a finales de julio y principios de agosto podrían tener efectos colaterales generalizados. Los viajeros pueden optar por visitar Francia a principios de año o ir a otros destinos para ahorrar dinero. Para complicar las cosas, París es un importante centro de conexión de vuelos a destinos de todo el continente.

La afluencia de viajeros a Francia para los Juegos Olímpicos podría limitar las opciones para las personas que viajan a destinos europeos más remotos, dice Kevin R. Williams, profesor asociado de economía en la Escuela de Administración de Yale. Los vuelos sin escalas a París desde Estados Unidos a finales de julio cuestan actualmente entre 600 y 1.000 dólares.

“Ese será un boleto más caro”, asegura Williams.