El gabinete de Biden y la sombra de Obama

Barak Obama y Joe Biden observan un partido de tenis en Camp David, en octubre de 2010. FOTO: Official White House/Pete Souza).


Joe Biden no tendrá un gabinete cargado a la izquierda, ni mucho menos “socialista” como repitió una y otra vez Donald Trump. Muy por el contrario, el futuro Presidente demócrata ha apostado por funcionarios moderados, tanto hombres como mujeres, la mayoría de los cuales se desempeñaron en importantes cargos (muchos en subsecretarías) durante la era de Barack Obama. Y para la tranquilidad de los mercados, como secretaria del Tesoro asumiría Janet Yellen, extitular de la Reserva Federal.

El mandatario electo de EE.UU. ha recurrido al establishment demócrata para la conformación de su equipo y a rostros que él mismo conoció durante su desempeño como Vicepresidente de Obama (2009-2017). Además, la apuesta de Biden es que su gabinete sea lo más diverso posible, en un claro contraste con el de Donald Trump, que siempre apostó por hombres blancos.

A la espera de que el propio Biden oficialice sus designaciones, tanto su equipo como la prensa estadounidense adelantaron los principales nombres. Y hay varios que harán “historia”. Ejemplo de esto último es Alejandro Mayorkas, un abogado cubanoamericano de 60 años, que asumirá el Departamento de Seguridad Interior, el primer latino en ese puesto clave que debe implementar las políticas de inmigración. Mayorkas fue subsecretario de Seguridad Interior entre 2013 y 2016.

También Avril Haines, de 51 años y subdirectora de la CIA al comienzo del segundo mandato de Obama, ejercerá en la dirección de la inteligencia nacional, la primera mujer en ese puesto. Tal relevancia tiene ese cargo que la jefatura de la CIA debe reportar a la cabeza de la dirección de inteligencia nacional.

Como “zar climático” el elegido fue John Kerry, de 76 años y ex secretario de Estado entre 2013 y 2017, mientras que la representación ante la ONU será asumida por la diplomática afroamericana, Linda Thomas-Greenfield, de 68 años. De alguna manera estas cuatro nominaciones representan la idea que Biden quiere transmitir: funcionarios con gran experiencia, alto reconocimiento, institucionalistas y que comparten la visión de un Estados Unidos líder en la cooperación internacional.

¿Otros cargos? Antony Blinken, de 58 años y que se desempeñó como asesor adjunto de Seguridad Nacional durante la era Obama, asumirá la dirección del Departamento de Estado, mientras que Jake Sullivan, de 43 años y que fue el encargado de diseñar la estrategia de política exterior de Hillary Clinton -además de trabajar como asesor de Biden en la Vicepresidencia- fue designado como el futuro consejero de Seguridad Nacional, un puesto de enorme relevancia y que no era ocupado por alguien tan joven desde McGeorge Bundy, quien con 41 asumió ese cargo durante la Presidencia de John F. Kennedy.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.