Almagro y Van Klaveren analizan fenómeno del crimen organizado transnacional en conversatorio de la UNAB

Alberto van Klaveren y Luis Almagro durante su participación en el conversatorio de la UNAB, moderado por Issa Kort, director general de Relaciones Internacionales de la casa de estudios.

El secretario general de la OEA y el canciller chileno participaron este lunes en un encuentro organizado por esa casa de estudios.


Temas como la democracia bajo asedio, el avance del populismo y, en especial, el fenómeno del crimen organizado transnacional fueron abordados este lunes por el secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y el canciller chileno Alberto van Klaveren durante un conversatorio organizado por la Universidad Andrés Bello (UNAB).

Bajo el nombre “Desafíos y oportunidades para Chile y América”, el encuentro, que forma parte del conversatorio Diálogos Globales fue moderado por Issa Kort, director general de Relaciones Internacionales de la casa de estudios.

El canciller chileno Alberto van Klaveren. Foto: UNAB

En su intervención, Van Klaveren afirmó que “las democracias en estos momentos están bajo asedio. Es un régimen que está siendo cuestionado desde distintas perspectivas y también en nuestra propia región, en América Latina”. “La democracia está bajo asedio desde adentro, a través de populismo, tanto desde las derechas como desde las izquierdas, y también desde afuera por regímenes autocráticos que van consolidándose lamentablemente”, explicó.

En ese sentido, el canciller chileno destacó el surgimiento en América Latina de “regímenes de carácter híbrido, que son regímenes que llegan al poder gracias a elecciones, en general elecciones libres o medianamente libres, pero que una vez que llegan al poder empiezan a socavar principios básicos de la democracia, como es la separación de poderes, empiezan a utilizar todos los mecanismos legales y semilegales a su alcance precisamente para secuestrar el régimen democrático”.

El secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro. Foto: UNAB

Si bien Van Klaveren dijo que existe alguna base para ser “relativamente optimista”, considerando que América Latina “es la segunda región en términos de regímenes democráticos después del caso europeo”, también advirtió sobre “el peligro del populismo, la tentación fácil, los liderazgos que surgen de manera casi espontánea, que muchas veces también apuntan a temas que están muy presentes en nuestras sociedades como el crimen organizado”. “Fenómeno que está muy presente lamentablemente en la realidad de América Latina. Y también la tentación ya autocrática de establecer regímenes ya fuertemente dictatoriales. Regímenes que concentran todo el poder y que de alguna manera reviven lo que fueron los fenómenos del autoritarismo en décadas anteriores”, añadió.

Almagro coincidió en la amenaza que representa el crimen organizado transnacional para América Latina. “Este es uno, si no el principal problema que enfrentan las democracias en la región. Es el tema de la seguridad, el tema de enfrentarse a un enemigo de bolsillos profundos, como es el crimen organizado”, señaló. A juicio del secretario general de la OEA, este fenómeno “hace a la realidad de los desafíos que tienen partidos políticos, instituciones, sistema judicial, el propio sistema parlamentario en cualquier país de la región”.

Vista del encuentro “Desafíos y oportunidades para Chile y América”, que forma parte del conversatorio Diálogos Globales de la casa de estudios. Foto: UNAB

Al respecto, Almagro mencionó algunas de las respuestas que se están adoptando en la región contra el crimen organizado, como “el tema de hacer un ataque frontal a la delincuencia y resolviendo esto de una manera masiva, con encarcelamientos masivos y con juicios”. “Hay otra dimensión de enfrentarse a la inseguridad y al crimen organizado que es lo que está planteando específicamente Ecuador a partir de incorporar nuevas dinámicas institucionales a la lucha contra el crimen organizado buscando, de alguna manera, equiparar el tablero en un país que está siendo muy afectado, especialmente por el narcotráfico”, detalló.

“Una tercera vía sería, obviamente, el fortalecimiento institucional. O sea, cómo las instituciones que están a cargo de la seguridad tengan las mejores condiciones de trabajo, las mejores condiciones de eficiencia, las mejores condiciones presupuestarias de recursos humanos y de recursos materiales como para hacer frente a ese problema, a ese flagelo”, señaló Almagro.

En ese sentido, destacó que “la cooperación internacional es fundamental”. A su juicio, “es imposible pensar que podemos resolver la seguridad desde un solo lugar y desde un solo país, pensar que la lucha contra el narcotráfico puede ser solamente realizada desde dentro de las fronteras nacionales sin tener en cuenta el efecto cucaracha o el efecto de la expansión de la transnacionalización que tiene este tema”.

El rector de la UNAB, Julio Castro, junto a Alberto van Klaveren, Luis Almagro e Issa Kort. Foto: UNAB

Van Klaveren, en ese sentido, recordó que Chile asumió durante el primer semestre de este año la conducción del Consenso de Brasilia, una iniciativa que respondió al presidente Lula el año pasado. “Fijamos tres prioridades para nuestro trabajo. La primera prioridad es justamente el crimen organizado transnacional, cómo podemos mejorar la cooperación entre los países sudamericanos para enfrentar este problema”, detalló. “Además, es un tema práctico, un tema para el cual no valen las diferencias ideológicas, para el cual no valen las diferencias políticas. Es un desafío que están enfrentando todos nuestros países”.

Almagro explicitó, en todo caso, la línea roja que, en su opinión, no se puede cruzar en la lucha contra el crimen organizado transnacional. “No soy partidario, nunca lo seré, de que nos comamos a los caníbales. O sea, la falta de seguridad en un país no puede hacer que nosotros apliquemos los mismos métodos que tiene el crimen organizado para enfrentarnos a ellos. Eso para mí no es admisible. Tenemos que ser siempre lo más consecuentes con el Estado de Derecho democrático y con los derechos humanos de todos y de todas. Y ahí está el principal desafío”, concluyó.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.