El oficial de las dos caras: el carabinero que testifica en favor de comuneros mapuches acusados de atentados, homicidios y robos en La Araucanía

Como el “Colorado” se le conoce al interior de Carabineros al teniente coronel Carlos Ramírez Lagos. No es un oficial más, menos en la Región de La Araucanía, donde llegó a ser jefe del Laboratorio de Criminalística (Labocar) de la zona, estando a cargo de los funcionarios que analizan las balas, huellas y todo lo que tenga que ver con los rastros que deja un hecho delictual.

Por haber alcanzado su “techo” en la institución, se acogió a retiro hace aproximadamente 4 años. Entonces, aprovechó sus conocimientos como perito y experto para seguir trabajando. Contactado por la Defensoría Penal Pública y otros abogados comenzó a hacer trabajos, especialmente para derribar los informes que sus exsubalternos presentaban en juicios e investigaciones ligadas a la violencia rural.

Uno de estos casos fue el de Luis Vásquez Tramolao, miembro de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), que perpetró una serie de ataques armados en las cercanías del fundo Vegas de Centenario, en La Araucanía. Incluso, en esa ocasión hubo un enfrentamiento con Carabineros.

El comandante (R) Ramírez hizo el peritaje criminalístico que controvertía las conclusiones de Labocar y, además, fue presentado como testigo en favor de la defensa de quien se decía parte del “Lof We Butarincon Recuperación Territorial”. Su declaración sirvió para absolverlo de los delitos de usurpación y sólo fue condenado por disparos injustificados, quedando en libertad.

Otro caso “emblemático” donde participó como perito de la defensa fue en otro ataque que tensionó una zona que no es fácil de llevar para las autoridades. También declaró en el juicio contra Patricio Queipul -sobrino del lonko de la Temucuicui- por homicidio frustrado a un trabajador de Mijael Carvones.

A pesar de la declaración del carabinero, donde cuestionó las diligencias del Labocar, Queipul fue condenado a 8 años de cárcel.

Su caso ya llamaba la atención de sus excolegas y también del Ministerio Público, pues cuando declaraba como perito de la defensa apelaba a las falencias de los mismos peritos que habían sido sus subordinados cuando fue jefe de Labocar. “Tenía mucha información interna y la usaba en beneficio personal”, relatan algunos uniformados.

Hasta ahí no se tenía más rastro del comandante Ramírez, hasta que, hace algunas semanas, se oficializó su reintegro a Carabineros. ¿Cómo? Debido al llamado al Servicio Activo que está impulsando el alto mando institucional.

El “Colorado”, sin embargo, tenía algunos casos vigentes que defender. Por ejemplo, un asalto en Victoria, donde dos carabineros terminaron heridos a bala.

El atraco, ocurrido en junio del 2021, dejó a tres personas detenidas: Joaquín Millanao Queipul (18), Ramón Toris Quiñinao (26) y Pablo Quidel Cañio (17), todos integrantes de la comunidad Temucuicui, ubicada en Ercilla.

En este caso, el comandante Ramírez -nuevamente- fue contratado como perito para detectar falencias en los informes criminalísticos de Labocar, donde a los imputados se les acusa de homicidio frustrado, robo con violencia y porte ilegal de armas.

El 12 de mayo se presentó la acusación contra los acusados, donde el comandante -ahora activo- fue presentado como testigo de la defensa para declarar en favor de Quidel Cañío, acusado de robo con violencia y denominado “preso político mapuche” por parte de la comunidad Temucuicui.

Consultados oficialmente, desde Carabineros señalaron que “la institución se encuentra en un proceso de llamados al servicio para dar respuestas a los mayores requerimientos de seguridad que surgen desde distintas regiones del país. Para ello se toman en consideración la hoja de vida de los funcionarios que se reintegran, así como declaraciones juradas en las cuales se ratifica que los llamados al servicio no presentan inhabilidades o incompatibilidades para el cargo”.

En esa misma línea, señalaron que “la Dirección Nacional del Personal es responsable de estos procesos de incorporar los llamados al servicio y es quien recepciona y evalúa los antecedentes antes de proceder a la reincorporación, verificando la base de datos y perfiles de los candidatos para la toma de la decisión de llamarlos al servicio”.

En la oficina de Labocar de Temuco, en tanto, siguen las dudas. Las fuentes consultadas advierten que Ramírez no es un reintegro cualquiera, pues llegó a un puesto clave: subcontralor de Carabineros de La Araucanía, es decir, pasarán por su despacho denuncias de irregularidades y documentación oficial reservada.