El trágico obituario de la música urbana chilena

El trágico obituario de la música urbana chilena

Parece una suerte de maldición. En cerca de cinco años, casi una decena de cantantes del género urbano han muerto en distintas circunstancias trágicas. Enfrentamientos a bala, peleas, accidente de tránsito y otras circunstancias, han frenado desde carreras incipientes hasta carreras derechamente ascendentes.


Los deseos de éxito que en sus canciones proyectaba Kevin Puelpan Cano, cuyo nombre artístico era Kevin Martes 13, se truncaron la madrugada del 10 de enero de 2018. Ese día, a causa de un confuso accidente automovilístico, falleció a los 17 años. El incidente ocurrió alrededor de las 4:30 de la madrugada en el sector de Santa Rosa con Franklin, luego que el Mercedes Benz en que el joven nacido en San Gregorio iba de acompañante, eludiera un control policial y chocara contra un bus del Transantiago.

Kevin Martes 13 murió en el lugar, mientras que sus dos amigos escaparon. Ese mismo día iba a grabar su nuevo videoclip para continuar con su, hasta ese momento, ascendente carrera musical.

El trágico obituario de la música urbana chilena. En la imagen, Kevin Puelpan Cano, cuyo nombre artístico era Kevin Martes 13,

Dos meses después, tras un doble allanamiento en la comuna de Macul, donde se desbarató la banda Los Lobos, de la población Santa Julia, fueron detenidos Ariel Bastián Orellana y un menor de edad, de iniciales S.E.G.R., quienes eran los acompañantes de Kevin Martes 13 el día del accidente.

“Yo soy cantante y no tengo ni 17, voy pa’ la cima, imagina a los 27″, escribió Kevin para su hit “Perigoso”, unos meses antes de su fallecimiento. El videoclip oficial de esa canción – en donde se muestran armas de fuego, lujosos automóviles y mujeres bailando semidesnudas- hoy tiene 8,3 millones de reproducciones en YouTube. Sus canciones hoy se siguen reproduciendo en distintas plataformas.

La muerte de Kevin – quien adquirió el “Martes 13″ porque decía tener mala suerte- enlutó al mundo de la música urbana y es la primera de una serie de muertes trágicas que han afectado, en los últimos cinco años, a una generación que ha impulsado este género, incluso más allá de las fronteras chilenas.

Hace unos meses en entrevista con el medio mexicano La Cultura, uno de los referentes del género urbano Pablo Chill-E, explicó la importancia del fallecido cantante en la escena nacional: “Kevin fue uno de los primeros en traer el reguetón. Lamentablemente no se desarrolló mucho más allá porque falleció, pero él era el que venía con el reguetón, el pionero del reguetón, así como para pegar el reguetón como ya a nivel mundial, ya había puertorriqueños escuchándolo. Yo era el del trap y él era del reguetón”, dijo.

La muerte de Kevin Martes 13 no fue la única que impactó al género urbano ese 2018. Unos meses después, la madrugada del 19 de agosto, falleció en un confuso incidente en el barrio Bellavista Germán Langenegger, de 29 años, reguetonero conocido como Sayer Paradise, del dúo Da Sweet.

Sebastián Contreras, el compañero de Da Sweet –dúo que entre una de sus particularidades realizó colaboraciones con cantantes de trayectoria como Gloria Simonetti y Wildo, y que pensaba sumarse a una canción con José Alfredo Fuentes- dijo entonces, en una entrevista televisiva: “Mi amigo no chocó curado, no falleció armando una pelea. Murió tratando de defender a una persona que, incluso, él no conocía”.

Contreras fue testigo de la muerte de Sayer Paradise y relató que él y su polola habían ido a ver la actuación de un grupo de cumbia. “No estuvieron más de una hora. Salieron del local y se acercaron a esperar el Uber. Ahí venían unos compadres arrancando de los guardias (…), los tiraron al suelo, saltaban y les pegaban patadas en la cabeza”, dijo, añadiendo que el cantante intentó detener la pelea, pero “en eso, él y su polola sintieron una patada. Ella cayó encima de mi amigo y él no reaccionó más”. El guardia, de nacionalidad venezolana, fue detenido y formalizado, y antes de ser trasladado al Centro de Justicia, expresó un “que me perdonen” cuando fue consultado por lo ocurrido.

Si bien la muerte de Kevin Martes 13 remeció a la industria musical nacional, por las proyecciones que el joven cantante tenía, el fallecimiento más mediático fue el ocurrido casi un año después. El domingo 24 de febrero de 2019 fue encontrado sin vida el cuerpo de Sebastián Leiva (26 años), el “Cangri”, entre un montón de rocas cerca del cerro Apacheta en Bolivia, a solo unos kilómetros de la frontera con Chile.

El joven que se había hecho conocido participando de algunos docurealitys, como Cangri y Dash, llevaba un tiempo impulsando su carrera en el mundo de la música urbana. Algunas de sus canciones, como “De Pana Remix”, alcanzan los 25 millones de reproducciones en YouTube.

Cangri
El trágico obituario de la música urbana chilena. En la imagen, Sebastián Leiva, "El Cangri"

El caso se transformó en un verdadero enigma. Lo conocido es que el cantante había grabado un videoclip en Antofagasta y, según algunos antecedentes, intentaba vender una camioneta obtenida como producto de una estafa, por lo que cruzó la frontera con el fatal desenlace.

Una de las teorías que se baraja sobre su muerte, es que Cangri y sus acompañantes (Sebastián Cornejo y Germán Gundián) habrían sido asaltados y dejados en el desierto. Otra tesis apunta al consumo de drogas y, una tercera, a una supuesta traición. Lo cierto es que la muerte de Leiva marcó a sus compañeros en la música urbana, quienes aún lo homenajean en algunas de sus canciones.

“Soy un rockstar dando tiros,

soy un rockstar cuando camino,

adelante siempre seguiré,

millonario yo me moriré”

"Rockstar". Cangri, Dash, Dímelo Fanta

Otra muerte que remeció a la escena de la música urbana nacional ocurrió el 30 de septiembre de 2020. Las crónicas rojas hablaron de un crimen pasional cuando relataban el asesinato de Rubén Alejandro Garrido Lucero de 28 años, cuya chapa como artista era Goliack el Brutality.

El hecho ocurrió en la esquina de Necochea con Portales, en la comuna de Lo Prado. Hasta ese lugar llegó Garrido, quien tenía antecedentes por tráfico de drogas. Ahí quedaba la casa de su amigo de infancia, Patricio Gamboa Troncoso (25 años).

Testigos vieron un intercambio de disparos, como consecuencia de un “lío de faldas”. Goliack el Brutality se llevó la peor parte del enfrentamiento y recibió varios impactos de bala. Fue el propio adversario quien lo intentó llevar hasta un centro asistencial. Sin embargo fue demasiado tarde: el músico murió en el camino. Este 2023 se realizó la audiencia de preparación del juicio oral contra Gamboa.

“Saben que ando ready en la calle y sin dar yo muchos detalles,

si me buscan el odio, lo más probable es que suenen los metales,

ojalá que no falle, si me quieren muerto sáquenla con chip a la calle,

porque me voy a pegar hasta que Dios a mí me calle”

"Yo me muero". Goliack El Brutality

Un poco más de un año después, el 18 de octubre de 2021, nuevamente las noticias hicieron eco de la muerte de un cantante urbano: Lansky 27 Guns. Lo que generó mayor connotación pública fue su funeral, que fue catalogado de alto riesgo por las autoridades de Copiapó. De hecho, terminó con nueve detenidos por exhibir armas y disparar al aire.

El cantante urbano de 18 años murió producto de un accidente de tránsito. El joven mantenía un amplio prontuario policial, por delitos de porte ilegal de arma de fuego, tráfico de drogas en pequeñas cantidades, robo frustrado, receptación, robo en lugar habitado y robo con intimidación.

“Mi madre me cuida en el cielo,

y me cuida la glock en la cintura,

pensando en grande me desvelo,

por eso es que estamos a la altura”

"Flote Flaite". Lansky 27 Guns, Diego Ignacio

Solo unos días después, el 27 de octubre de 2021, nuevamente el mundo de la música urbana perdió a uno de sus integrantes producto de un hecho policial. El cantante conocido como The Clown, murió a los 26 años, producto de un impacto de bala en su cabeza. Ese día, Francisco Orellana, “El payasito de oro”, como se hacía llamar, se encontraba en una barbería en la calle Salvador Allende en la comuna de Lo Espejo, cuando dos sujetos armados ingresaron al lugar con el objetivo de quitarle las llaves de un auto marca Audi estacionado fuera del local a uno de los dueños del establecimiento. En medio del forcejeo empezaron a quitarle las pertenencias a los clientes, entre ellos Orellana, quien, tras resistirse a entregar sus joyas, recibió un impacto de bala en la cabeza.

Tiempo más tarde, su familia aseguraría que la muerte de Orellana, quien era padre de un niño de 8 meses en ese entonces, no habría sido consecuencia del robo – sus joyas fueron encontradas- sino que por un homicidio por encargo, producto de la envidia de músicos rivales. “Esto pasa en este ambiente de estos niños que cantan esta música”, dijo el padre de The Clown, Raúl Orellana, en Mucho Gusto. “Algunos son apegados mas al ámbito delictual y, cuando ven a otros que les va bien, que son de otro ámbito, que son más sanos... mi hijo era sano... varios amigos de ellos han recibido balazos”.

Un negro 2023

Había pasado un tiempo sin que los representantes de la música chilena fueran noticia por hechos policiales con desenlace fatal. Sin embargo, el 24 de octubre de 2022, nuevamente los hechos estuvieron a punto de repetirse. Ese lunes, cerca de las 20 horas, se registró una balacera en las afueras de una pizzería en la comuna de Coronel, en la región del Biobío. Las cámaras de seguridad, que fueron ampliamente difundidas en las redes sociales y los medios de comunicación, mostraban a tres sujetos que compraban en el local. Uno era el cantante urbano NashoFlight, de solo 16 años, entonces. El joven recibió una serie de disparos que lo dejaron gravemente herido. Tras este ataque, otro individuo que alcanzó a esconderse dentro del recinto repelió el ataque con un arma aparentemente de fuego. El hecho fue catalogado como un ajuste de cuentas. El artista terminó en sillas de ruedas.

Hoy NashoFlight sigue en el mundo de la música y en una de sus canciones cuenta su experiencia: “Me dieron en la médula, dijeron que no iba a caminar, me negué a morir aunque me quería matar...”

Sin embargo, otro artista no correría la misma suerte en 2023. El 9 de abril, cinco venezolanos murieron en una balacera a la salida de una parcela en Lampa. Al principio los medios hablaban de una masacre tras un baby shower, pero tras indagaciones terminaron derivando en una vendeta tras un “after”: fiestas donde se escucha música electrónica y se consumen drogas sintéticas. Entre las víctimas se encontraba Maryaikol Monasterios, conocido en el mundo de la música urbana como “El Maay”. Los antecedentes judiciales, como publicó La Tercera el 18 de junio pasado, apuntan a que Monasterios se encontraba en el mismo auto que Leonardo Guillarte, hombre que se habría descolgado del Tren de Aragua en Chile. Monasterios y los otros tres acompañantes murieron acribillados en el fuego cruzado.

El joven partía en el mundo de la música urbana de Chile y uno de los últimos temas era “Encapuchado”, cuyo video fue grabado en la población La Legua de San Joaquín.

“Desde el barrio salí, en el barrio me crié,

soñé con la cima y ahí estaré,

somos de la calle no importa con quién,

me quisieron quitar, pero no me quité”

"Desde el barrio". El Maay

La noche del viernes 26 de mayo, la escena urbana nuevamente se llenó de tristeza tras el anuncio del fallecimiento de Gabriel Zúñiga, cantante conocido como Galee Galee. El intérprete se encontraba internado en el hospital Félix Bulnes, luego de sufrir una lesión que lo mantenía grave. Tenía 29 años.

La carrera del artista empezó a crecer en 2022, cuando firmó un contrato con el Sello Sony Music y se presentó en el festival Lollapalooza junto a Polimá Westcoast. El cantante también colaboró con Pablo Chill-E y Harry Nach en la canción “Big Cut”, que hoy tiene más de 26 millones de visualizaciones en YouTube.

El trágico obituario de la música urbana chilena. En la imagen, Gabriel Zúñiga, conocido como Galee Galee. Créditos: Claudio Alveal

El artista atravesaba un complejo momento personal, lo que dejó entrever a través de un último mensaje en su Instagram: “Ustedes no saben el daño que están haciendo. Corten la hueá, loco. Van a causar que pasen hueás que nadie quiere”. Los días previos a su muerte, había sido “funado” con algunas publicaciones realizadas en redes sociales, acusándolo de haber sido infiel a sus parejas. Zúñiga había intentado, en vano, que la gente dejara de acosar, y luego implorando tranquilidad.

El suicidio del artista generó un fuerte remezón en el género. Y muchos de sus colegas comenzaron a hablar de los problemas de salud mental que lo afectaban. En junio de este año, otro artista de la música urbana, Sayian Jimmy, intentó atentar contra su vida, sufriendo una descompensación por automedicación. Entre los motivos de su decisión, según un comunicado, estuvieron “el estrés, depresión y malos comentarios de la gente hacia él como artista”.

No había pasado ni un mes de la muerte de Galee Galee y otro desenlace de un promisorio artista, remeció a la escena de la música urbana nacional. El cantante Giuliano Yankees de solo 16 años, falleció la madrugada del martes 6 de junio, luego de protagonizar un accidente de tránsito en Puente Alto.

El hecho ocurrió pasadas la una de la mañana, cuando el artista circulaba en moto por calle Eyzaguirre a la altura de Ejército Libertador. El joven perdió el control y cayó a la calzada para luego ser atropellado por un automóvil que circulaba en sentido contrario. Su muerte se constató en el Hospital Sótero del Río, cerca de las 3:00 horas.

“Soy un simple bandolero,

se me fue a quien más yo quiero,

hoy la calle es mi consuelo

desahogarme dando fuego”

"Soy un simple bandolero". Giuliano Yankees, Facksiniel, Simón la Letra

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