Estricto confinamiento y nuevo formato: la Superliga de China se adecua a la pandemia

Los ojos del mundo se posaron en China, todo por culpa del coronavirus. En el gigante asiático surgió la enfermedad que ha puesto de rodillas al mundo en 2020 y que obligó, entre muchas otras cosas, a aplazar competencias deportivas, unas que de a poco van volviendo. Es el caso de la Superliga, el campeonato nacional de Primera División, que comienza este sábado después de un retraso de cinco meses.

El torneo ha debido enfrentar diversos cambios en logística y calendario. El principal dice relación con un formato reducido y que los jugadores, técnicos y árbitros estarán aislados durante las nueve semanas que durará la primera parte de la temporada. Los involucrados estarán bajo un confinamiento estricto en el cual solo pueden moverse entre hoteles, campos de entrenamiento y los estadios. Los partidos se disputarán a puertas cerradas. Además, deberán usar una plataforma digital para informar su localización cuando sea requerido por las autoridades. En ese contexto, la federación local lanzó una advertencia: el que se salte las medidas enfrentará multas y suspensiones, y también expone a su equipo a ser expulsado del torneo.

Con el nuevo formato de dividir a los equipos en dos grupos, los partidos se disputarán en dos sedes: Dalian y Suzhou. Antes de desembarcar en las ciudades, los jugadores y técnicos se sometieron durante 21 días a una prueba serológica y dos PCR. Los 1.870 futbolistas que han pasado por los exámenes han dado negativo. A finales de marzo, el belga Marouane Fellaini, del Shandong Luneng, dio positivo y tuvo que ser hospitalizado en un centro de salud.

En lugar de un torneo largo de 16 equipos con 30 fechas, se establecieron dos grupos de ocho. Esta primera parte finalizará el 28 de septiembre. Los cuatro primeros de cada grupo clasifican para la segunda ronda, mientras que los ocho restantes jugarán por la permanencia.

El primer partido de la Superliga 2020 se juega a las 6.15 de la mañana de Chile en Dalian, entre el último campeón, Guangzhou Evergrande, que dirige el italiano Fabio Cannavaro, contra el actual monarca de la Copa, el Shanghai Shenhua, ese mismo elenco por el cual pasó el argentino Carlos Tevez.

Las restricciones propias de la pandemia impidieron grandes movimientos de mercado, no obstante la Superliga cuenta con importantes jugadores y entrenadores en su competencia. Además de Cannavaro (que está en el top ten de los entrenadores mejor pagados del mundo, con 14 millones de euros al año), otros estrategas de renombre son el español Rafa Benítez (Dalian Pro), el italiano Roberto Donadoni (Shenzhen), el neerlandés Giovanni Van Bronckhorst (Guangzhou R&F) y el francés Bruno Genésio (Beijing Guoan).