Columna de Daniela Lagos: Avatar, la leyenda de Aang: el viaje del pequeño héroe

Si esa es la búsqueda, Avatar: La leyenda de Aang tiene buenas posibilidades de ser un éxito, sobre todo en un público infantil y adolescente. Presenta una historia fácil de seguir, con mucha acción, escenas de pelea, algo de humor y un grupo de personajes al centro con buenas intenciones y ganas de ser mejores.



Es una fórmula que ha sido usada antes en literatura, cine y televisión; un modelo que asegura que veremos aventuras, momentos de dudas y dolor, acción y ojalá un final triunfal. Además, a veces también es sinónimo de franquicias millonarias.

Se trata del “viaje del héroe”, término acuñado para aunar todas esas historias que parten con una persona que parece llevar una vida común hasta que recibe un llamado para ser una pieza fundamental de aventuras con enormes consecuencias. Es la historia de Frodo en El señor de los anillos, de Han Solo en La guerra de las galaxias, de Neo en The Matrix, de Harry Potter... Y también de Aang en la franquicia Avatar.

Aang es un niño de 12 años, integrante de los Nómadas del Aire, una de las cuatro naciones que componen el mundo. Las otras tres son el Reino Tierra, las Tribus del Agua y la Nación del Fuego. En cada una de ellas hay personas que pueden manejar sus elementos distintivos y Aang está entrenando para ser Maestro Aire. Esto hasta que se entera que es más que esto: su llamado es a ser el Avatar, la única persona que maneja los cuatro elementos y que debe mantener la armonía entre las naciones. El problema es que poco después de que se entera de esto, su tribu es atacada y él queda atrapado en un iceberg por 100 años. Cuando despierta, los maestros aire parecen estar extintos y la Nación del Fuego lo domina todo. Y así, su viaje se inicia.

Si bien este es un nuevo estreno para Netflix, su historia ya tiene casi 20 años, desde la apartición de Avatar: The last airbender, que tuvo tres exitosas temporadas en Nickelodeon a mediados de la década de los 2000 y que con los años ha mantenido una fanaticada fiel.

Ahora su trama, universo y protagonista están de vuelta, quizás buscando atraer a la hinchada fiel aunque más probablemente apostando por presentar las aventuras en un nuevo formato (ya no animado sino que con personajes de carne y hueso) a una audiencia que no se ha enterado de las versiones anteriores.

Si esa es la búsqueda, Avatar: La leyenda de Aang tiene buenas posibilidades de ser un éxito, sobre todo en un público infantil y adolescente. Presenta una historia fácil de seguir, con mucha acción, escenas de pelea, algo de humor y un grupo de personajes al centro con buenas intenciones y ganas de ser mejores.

Claro, junto con esto también hay varios momentos de brocha gruesa, actuaciones más aceptables que muy buenas y poca sutileza y profundidad. Elementos que otros viajes de héroes anteriores han manejado con maestría y que aquí quedan algo cortos, pero sigue siendo un buen viaje para embarcarse, ojalá junto con niños que puedan asombrarse de este viejo nuevo mundo que se les presenta.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.