“Porque mi afán no ha sido entretenerte, sino informarte”, dice uno de los epígrafes de esta novela, tomado de Los viajes de Gulliver, la memorable sátira de Jonathan Swift. El segundo procede de Al faro, una de las obras más complejas y sofisticadas de Virginia Woolf: “¿No había seguridades? ¿No podían aprenderse de memoria las mañas del mundo?”. De algún modo ambas obras resuenan en esta novela, así como el humor pesimista de Samuel Beckett. Si en El cuento de la criada Margaret Atwood ficcionó con una distopía feminista, acá describe un mundo postapocalíptico originado por una plaga creada en un laboratorio científico. Hija de biólogo, la escritora canadiense plantea una sátira oscura y desoladora en torno a la manipulación genética. Hombre de las Nieves es el único sobreviviente humano del colapso, y convive con mutantes genéticos, mientras se obstina en revivir, a través de la memoria, su antigua vida. Narradora inteligente y audaz, en esta obra Atwood parece más guiada por la inventiva que por la intención de comunicar emociones genuinas.

El título de este libro de cuentos funciona en varios sentidos, como una caja de amplias resonancias. Los relatos que dan forma al volumen se mueven en ambientes familiares, sí, pero más bien se deslizan por las grietas y fisuras que se esconden tras la imagen del “ambiente familiar”. En cierto sentido, subvierten esa idea, y al mismo tiempo, vistas de otro modo, aquellas grietas, heridas, deslealtades y violencias podrían leerse como familiares o recurrentes. Maivo Suárez es una escritora sagaz y perceptiva, una narradora que concilia agilidad y agudeza, destreza narrativa y sensibilidad sicológica. Gran observadora de las tensiones bajo la superficie de lo cotidiano, la autora ofrece un conjunto de historias que van de la infidelidad y el erotismo al abuso infantil, relatos a veces irónicos, sorprendentes y conmovedores.

Enrique Lihn distinguía entre el Kafka adjetivo, lo kafkiano, y el Kafka sustantivo, la obra propiamente tal de Kafka. Y observaba una paradoja: la popularización del adjetivo en el Chile de mediados de los años 80, como si fuera una herramienta precisa para deconstruir o reducir el discurso dictatorial, en circunstancias que la obra de Kafka se presta poco para lecturas políticas. La columna que da título a este volumen apareció en revista Cauce en 1984, y es uno de los más de 70 artículos reunidos en esta edición. Escritos entre 1955 y 1988, el año de su muerte, los ensayos, prólogos y conferencias recogidos en este libro no se habían recopilado anteriormente. El conjunto recupera textos sobre literatura, arte, política, artículos de contingencia, debates sobre el lugar del escritor, y subraya la mirada aguda, lúcida y sin condescendencia de gran poeta chileno.

Es una de las emociones esenciales del ser humano y nos acompaña desde la niñez: el miedo. En la infancia especialmente tememos a la oscuridad o a los seres fantásticos que aguardan entre las sombras y despiertan cuando llega la noche. Pero hay formas de combatir ese miedo, nos cuenta la escritora María José Ferrada: “Pones una estrella/ dentro de una caja de fósforos/ y la guardas en tu bolsillo o debajo de la almohada”, escribe en este libro protagonizado por las cálidas y coloridas ilustraciones de Karina Letelier. ¿Es posible guardar una estrella en una caja de fósforos? “El manual dice que hasta una galaxia podría acomodarse./ Que se trata de un pacto antiguo,/ un tratado de colaboración entre los niños y el cielo”, dice la autora del libro, una bella edición de un sello dedicado a acercar a los niños a la obra de escritores chilenos.